༻ SOLO MI CHICO ༺

•°•-CAP : 51 -•°• 💜

NARRA JUNGKOOK :

Ya se iba a cumplir casi un mes después de la última vez que vi a taehyung y el tampoco se había tratado de comunicar conmigo aunque yo tampoco con él.

Si acaso me llamará no sabría como explicarle mi boda y el cachorrito...

Desde que taehyung dijo que dejaría su puesto como ídol sus fans han estado esperando lo que como Ceo haría, aunque un porcentaje de sus fans le daban la espalda por el simple hecho de que el decidiera ya no ser ídol.

Cuando me case con baekyun, él tomo mucho poder tanto social como también las acciones de su empresa subían, aún no se sabía nada de su hermana.

Después de la muerte del padre de Jackson ya no recibí más amenazas, no se si era por que estaba con baekyun o por que la hermana de baekyun había olvidado la deuda de mi padre.

Aunque aún no entendía el porqué la hermana de baekyun se aferraba a esa que mi padre tenía, ella ganaba incluso más cada hora... Pero por alguna razón ella se seguía aferrando a lo mismo, aunque había dejado de amenazarme, cada vez que salía sentía como que me vigilarán.

Al mudarme a casa de baekyun, el me había puesto unos guardaespaldas pero... Nadie sería tan bueno como Jackson, a quienes ahora me protegían era muy fácil engañarlos.

Y la marca en mi cuello tampoco dolía, a pesar de estar marcados y estar alejados uno del otro no dolía, talvez porque taehyung piensa que estoy completamente a salvo o que... Era mejor no recordar.

Ahora  estaba sentado en una tienda muy común de la ciudad...

—Disculpe, pero lleva como media hora viendo las fotos del mismo ídol—dijo uno de los guardaespaldas acercándose a mí.

—¿Usted cree que los destinados estarán siempre juntos? Responda me con sinceridad — pregunté.

—Pienso que la vida de los destinados a veces es la más triste, unos cuantos pueden permanecer juntos y otros morir de dolor debido a su decepción, mientras que los que no son destinados requieren ser marcados para sufrir tal dolor... Esa es mi opinión, espero que no lo moleste —menciono sinceramente aquella persona.

Tan cierto... Pensé.

NARRADOR OMNISCIENTE :

—YoonGi... Apenas tengo como un mes de embarazo y ya tienes un cuarto separado para el cachorrito —dijo el omega viendo como su alfa se tomaba mucho tiempo en aquel cuarto.

El alfa estaba muy ansioso por la llegada de su hijo que compraba muchas cosas para bebés cada vez que veía algo.

—Cariño todo debe estar listo para cuando llegue el bebé, estará rodeado de mucho amor porque yo nunca dejaré de amarte —menciono el alfa haciéndole saber el amor que tiene hacia su amega.

—Humm... Creo que no ser padre te está afectando de manera muy buena—dijo el omega apoyándose en la puerta de aquella habitación espaciosa.

—¿De que color crees que deba pintarlo? —pregunto el alfa mirando los alrededores del interior de esa habitación.

El omega se adentro a aquella habitación e hizo lo mismo.

Ambos daban vueltas muy lentas hasta que sus miradas se encontrarán.. Un pequeño juego se le había ocurrido al omega.

—Me atenderías si te digo que tengo antojo de algo? —mencionó el omega con una mirada pícara.

—Mi deber es complacer a mi omega —respondió el alfa acercándose al omega, puesto que el alfa pensaba que el omega le pediría un beso.

El alfa se acerco tanto que solo quedaban unos pequeños centímetros de entre la pareja.

El omega soltó una pequeña risilla que ahora era audible dentro de la habitación en la tanto el alfa como el omega aún estaban muy cerca.

— Quiero dos combos del McDonald's ¿Que pensabas que te iba a pedir? —dijo el omega aun sonriente.

La mirada del alfa se veía sorprendído, puesto que había caído en el juego de su omega.

Agacho la cabeza con una sonrisa sarcástica y la mantuvo baja por unos cuantos segundos.

—Sabías lo que yo quería y me tendiste una trampa, después de todo me case con un omega muy juguetón —respondió el alfa a medida que levantaba el rostro y se acercaba a su omega.

Cuando el omega noto aquella acción retrocedió lentamente hacia la puerta que se hallaba abierta.

El alfa hizo lo mismo pero al estar lo suficientemente cerca como para alcanzar la manija de la puerta, se escucho aquel sonido al cerrar la puerta.

Mientras más cerca lo tenía el omega sonreía levemente.

—Creo que me debes algo —dijo el alfa.

Al instante la mano del alfa se fue hacia la cintura del omega y lo acercó a él, mientras que el omega deslizaba su mano hacia la nuca de su alfa. Ambos se acercaron entre si para poder darse aquel beso, pero que aún no se daba.

—¿Cuantos combos dijiste? —pregunto el alfa jugueteando con la punta de sus colmillos.

Ahora el sorprendido era el omega, ya que el también había caído en la misma trampa.

—Bueno, ya no los quiero —dijo el omega saliendo de esa habitación.

El alfa sonreía satisfactoriamente al ver las expresiones de su omega, eso significaba que él había ganado.

—¡Se que te estás ríendo, pero cambie de opinión ahora quiero tres combos, te doy una hora para que regreses con mi comida! —se escuchaba desde un piso abajo la petición del omega.

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Yulisakok