Violación artificial [Terminada]

capitulo 05

Hoy va a ser el día menos pensado

2 meses después...

– No me mal intérpretes que no estoy en ti para perjudicarte , sino para que puedas aprender de mí, para robarte sonrisas y cuando estés triste no podrás deshacerte de mí aunque lo intentes. Soy algo en ti y vivo justo ahí, –un niño señala a mi vientre.

Desperté de lo que solía parecer un sueño, esas palabras y ese niño señalando mi vientre, no hallaba explicación, era la tercera vez en el mes que tenía ese sueño. Últimamente no he estado bien de salud, tengo náuseas y duermo mucho, mamá Diana Dice que tengo síntomas de embarazada pero es obvio que eso no puede ser.

Es domingo y tengo él día libre, me acomodo un poco en mi cama y decido seguir durmiendo cinco minutos más.

Ines entra a la habitación sin mi autorización, dañando el momento de paz que había en mi.

– Mira a quien tenemos aquí nada mas ni nada menos que  la futura mamá.— De que estas hablando? Sera que te volvistes loca?

– Ines, no quiero discutir por favor vete— Le dije de la manera mas amable que puedo ser con ella.

– Tranquila vengo en son de paz. Solo quería preguntar algo nada mas. Pensaste que todos nos comeriamos ese cuento de que eras una blanca paloma o ¿qué nunca nos ibamos a dar cuenta?

– De que hablas, porque simplemente no me dices lo que quieres saber y te evitas todas esas indirectas? — Me pare frente a ella y la desafíe, tenía mis ojos fijos en Inés, mientras ella disfrutaba de mi enojo.

–¿Cuantos meses tienes de embarazo muchachita?– ¿De donde saca ella esas cosas? No le di importancia, la ignore y me volví acostar, parece que se molesto mucho porque de un golpe cerro la puerta.

Se me quito el sueño, así que me voy a dar una ducha para verme con irene, quiere enseñarme al guapo de su primo que vino de viaje.

Estoy ahora mucho mejor, nada como sentirse limpia y tranquila; decido ponerme unos jean negro con un sueter rojo una talla mas grande que la mía y mis botas de cuero negra.

Tocan la puerta.

– Adelante, Mamá Diana entra junto a Ines y Rodrigo.

– Tenemos que hablar Eva. – por la expresión de mamá Diana, me dice que nada esta bien.

– Mamá, deja de darle vueltas al asunto y preguntale si esta embarzada.

– Rodrigo eres idiota o que!!? Solo en una cabeza retorsida se le ocurre pensar que estoy embarazada. 

– ¿Tú me crees mamá Diana verdad?– No dice nada simplemente me entrega una prueba de embarazo, mis ojos se cristalizan por la falta de confianza, ella no cree en mi. 

– Yo nunca he estado con un hombre, yo no se que es sentir los labios de otra persona rosando los mios, pero algo si le puedo asegurar que no estoy embarazada, y ninguno tiene porque levantarme calumnias.

– Eva, deja de hacerte la mosquita muerta y alte la prueba, nadie mas que yo se lo mentirosa y manipuladora que eres.

– Mama Diana tú mas que nadie me conoces, sabes que soy todo lo contrario que dicen de mi.

– Sacame de dudas. —En su mano se encuentra una prueba de embarazo, me la pasa y con su mirada me señala que entre al baño, decidí hacérmela, así saldrán de dudas. No creó perdonar a mamá Diana por esta humillación.

En las instrucciones dice que hay que esperar dos minutos para saber el resultado. Salgo del baño y entro en la habitación para  esperar que pasen los dos minutos, Ines me quita la prueba  y se aleja de mi.

Rodrigo y Ines estan anciosos por el resultado en cambio yo estoy intentando calmarme por la situación, – Creo que Irene se va a morir de la risa cuando se entere de lo que me paso hoy.

– Eva quieres que yo recoja tus malestas o lo haces tú? 

– ¿A qué te refieres con que recoja mis maletas o tu lo harás?— En realidad no entiendo a lo que se refiere.

– Salio positivo.— lo primero que hice fue reírme porque eso es imposible yo no estado con un hombre.

– No estamos para broma Ines, muestra pa ve– mamá Diana le quita la prueba a Ines y Rodrigo se la quita a mamá Diana, ella me queda mirando como si fuera cometido un crimen.

–Que desilusionada estoy de ti Eva, solo tienes dieciocho años, trabajas llevando café y estudias los sábado, como piensas mantener a esa criatura.

– Eso debe ser una broma, si se pusieron de acuerdo es mejor que me lo digan porque no me causa gracia.

Rodrigo me pasa la prueba y no se que decir, tal vez esto se equivoco o yo que se.
¿Cómo es posible que pasen estas cosas?

Poco a poco todo se va tornando negro a mi alrededor, veo como Rodrigo llama por mi nombre, de ahí no supe más que pasó.