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Querida María.

Francamente no recuerdo en qué momento te hiciste grande. ¿Qué día fue cuando dejaste las princesas? Ni siquiera recuerdo el momento en que empezaste a andar en bicicleta sin rueditas, que grosera la vida ya que te está haciendo grande, y no hay problema en que crezcas, el problema es que a medida de eso, disminuye mi tiempo contigo.

Sabes, durante un tiempo anduve perdido o más bien vagando, algo así como una persona sin rumbo, siempre me cuestionaba muchas cosas, por ejemplo, el ¿por qué? de mi existencia y para ser sincero aun me cuestiono algunas cosas, pero, no miento al decir que tu eres el mejor motivo para existir, nunca he tenido lujos, como comprar una isla, visitar la biblioteca del congreso o ver jugar al Barcelona, pero el lujo de tenerte es mejor que cualquiera de ellos.

Me gustaría hacerte un mundo color rosa o rojo (tu color favorito) pero, el mundo no siempre es como uno quisiera, tendrás que aprender de tus errores y jamás dejamos de aprender, te adelanto que conocerás el dolor y sufrirás muchas veces, pero nunca estarás sola, aun si ya no vivo siempre estaré presente, en el perro que cruza la calle, en el ciruelo que mueve el viento o quizá en el abrazo que dejare impregnado en ti, siempre recuerda que el dolor es un sentimiento y los sentimientos es lo que nos hace estar vivos, jamás dejes de soñar, cepíllate el cabello antes de dormir y lávate los dientes después de comer, se amable con las personas, pero no siempre podrás caerle bien a todo el mundo, cuida tu salud pero recuerda que unos kilos de más es lo de menos, las malas palabras hacen un léxico imperfecto trata de evitarlas y nunca juzgues a las personas dado que nunca sabremos lo que han sufrido. Conocerás la constitución política, pero te diré otras leyes que no rigen nuestro país, sin embargo te alegrarán el corazón y te harán una mejor persona.
Trata bien a los viejitos del mercado, nunca les des lo que te sobra, da lo que quieras dar, aunque sea solo una sonrisa.
Agradece siempre después de comer.
Ama y respeta a tu madre.
El café alimenta el alma.
Da los buenos días y alegra cuando puedas.
Alimenta a los perritos de la calle cuando los topes, por lo menos háblales.
Valora lo que tienes y no te frustres por lo que no.
Donde come uno pueden comer dos, incluso hasta tres.
Una nube no hace el cielo.
Persignate y agradece a nuestro creador, aun si fue un mal día.
Cede el paso siempre, no importa la urgencia que tengas.

Recuerda tu esencia, eres amor y estoy orgulloso de ti, no escogería a nadie más, te elegiría siempre a ti. Jamás dudes de ti y siempre se fiel a tus ideas, no temas al fracaso porque fracasaras si lo haces, no me pongas como ejemplo a seguir, aunque siempre trato de ser bueno, mejor sigue los pasos de Virginia y no porque se haya suicidado, sino porque vivió sin importar el qué dirán, se atrevió a hacer lo que le gustaba y amo bonito, a fin de cuentas, murió por alguien más, eso es amor verdadero como el de tu madre a quien siempre deberás honrar, sin embargo hagas lo que hagas y seas como seas, siempre te amare, sin importar el color de tu cabello o tus gustos musicales, siempre invierte en ti, en tu felicidad vive y no comas muchas sabritas, no te fijes en lo material, recuerda que existe gente tan pobre que lo único que tiene es dinero, no des nada por sentado dado que lo único seguro es la muerte, recuerda que como existe el bien también existe el mal, pero si Dios esta contigo, nadie podrá contra ti.
Cuando tus problemas sean muchos y el peso del mundo sea demasiado para tus hombros, comparte, por ello busca amor, nada más que amor. Aunque sin duda alguna tu podrás con eso y más.

Te amo, a veces más a veces menos, pero siempre te amaré más que menos.

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⏰ Última actualización: May 17, 2021 ⏰

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Mi pequeño gran amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora