｡⋆9 meses⋆｡rubegetta ✓

💘okonchatel'nyy💘

»Final«

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Pasó aproximadamente unos 5 meses, ya pasando el cumpleaños de Rubén, en las cuales Mangel y Lolito se quedaban con Rubius y Vegetta, así para que el cachorro no se encariñe con Rubén, según el mismo, el mismo día que nació el cachorro, Mangel y su pareja decidieron llamarlo Manguito, cosa que a Rubén le pareció muy tierno. Cada vez que el cachorro terminaba de amamantarse rapidamente se los pasaba a Mangel, aunque en el fondo, no quería entregarselo a nadie, necesitaba cuidarlo, su animal interior sollozaba o se ponía algo agresivo cuando le pasaban el cachorro a Mangel, Rubius hacía lo posible para que aquel lado no saliera y terminara atacando a alguien con tal de que "su cachorro" estuviera bien.

Todavía recuerda la propuesta que le dijo a su mejor amigo.

"~•Mahe, si quieres, le puedo decir a los Dioses que si pueden hacer que Manguito tenga algunas partes físicas para que se parezca a ustedes- Habló con una sonrisa el híbrido-

~•Uhm... Me parece bien, aunque igual quiero que tenga algo de parecido en ti, después de todo, gracias a ti, puedo tener de alguien a quin cuidar, muchas gracias mi Rubiuh- Dijo mientras abrazaba con delicadeza el cuerpo de su amigo, siendo correspondido por su acompañante-

~•Pero tendrás que esperar un poco- Ambos se dieron una dulce sonrisa-"

Rubius al pasarle el cachorro a Mangel, sentía envidia al ver como su amigo hacia su papel de madre, aquello se le ocurrió al híbrido oso ya que él , no quería encariñarse, claro que no le funcionó, cada vez que el cachorro tenía hambre, Rubén al darle pecho, sentía que el tiempo se detenía y quedaban solos, se sentía muy cómodo estando con él, como si sacara a la luz su lado de protección y lado materno, quisiera quedarse todo el tiempo con él, no queriendo soltarlo, pero cuando termina de tomar, sale de su mente y lo hace como si nunca hubiese pasado nada, haciendo que se estuviese lastimando psicológicamente al no tenerlo con él.

Vegetta notaba que con el tiempo, Rubén se tornaba más que cariñoso con Manguito cada vez que estaban solos, si, los espiaba.

Habían ido al doctor, llevandose la noticia de que al cumplir 6 meses, el cachorro ya debiera dejar de tomar pecho.
El sexto mes se hiso presente, Rubius se sintió nervioso, triste y hasta un poco agresivo, no pensaba que pasaría con tanta rapidez los días.
Rubén se encontraba en su habitación con Manguito, lo tenía abrazado, estaba solo en la habitación, suspiró mientras se limpiaba las lagrimas reveldes, no quería soltarlo, se sentía fatal, necesitaba de su cachorro, su omega se encontraba a la defensiva, con todos sus sentidos activados. Rubius no puede seguir aguantandosé, quería sacar de su casa tanto a Mangel y a Lolito y gritarles "¡Vayan a tomar por culo! ¡El cachorro es mío" y cerrarles la puerta en la cara, pero no, no podía hacerle eso a Mangel, su mejor amigo desde hace mucho tiempo.

Tomando el autocontrol de su animal interior, bajó al primer piso en el que se encontraba su alfa juntó con Lolito y Mangel, ambos ya preparados para irse. Se acercó a ellos y con cuidado les entregó a Manguito, aunque su omega le gritase que no, mientras veía la sonrisa de cariño que le daba Mangel a su ahora niño, se despidió de ambos no sin antes volverle a decirle gracias a su mejor amigo y se retiró por la gran puerta, Rubén le siguió de lejos viendo como el niño tenía apoyado su rostro en el hombro de Mangel, lo miraba atentamente y con una sonrisa comenzó a mover su pequeña mano, como si estuviese despidiéndose, cosa que tanto a Rubén como a su animal interior le rompió el alma.