Desperté por un rayo de sol que se traspasó por mis cortinas; la misma rutina de siempre: sin ideas, sin color, sin sabor.
-Buenos días, ¿cómo te sientes hoy?
-¿Quién se supone que eres?
-¡Ah! Lo siento, soy tu conciencia, soy parte de ti.
-Se supone que "mi conciencia" solo está cuando la necesito, no en cualquier hora del día.
-Siempre me necesitas, a cualquier hora del día, soy esa pequeña parte que dice "todo estará bien, eres fuerte".
-Yo no me considero fuerte, soy una persona débil, lo único bueno que hago es fingir.
-Te sientes sola, tu familia solo ve lo que quiere ver, ¿en realidad amas a tu familia?
-Ya sabes la respuesta.
-Lo sé, solo quiero que me lo digas tú.
-No tengo familia, son sólo conocidos.
-¿Es malo compartir una recámara?
-No tienes privacidad.
-Di la verdad, no te dejan desahogarte, sientes que explotas por dentro y prefieres lastimarte físicamente en vez de llorar.
-Boxear no es lastimarme físicamente, es saber defenderte, en esta vida es necesario.
-¿Sabes porque aprendiste a boxear?
-Me golpearon por algo que nunca pasó, fue mi forma de expresarme.
-¿Y qué sucedió después?
-Me provocaron, no fue una buena opción.
-Haz hecho de tu vida una mierda.
-Eres mi conciencia, no deberías hablar así.
-Soy tu amiga, no lograrás alejarme.
-He alejado a muchas personas, y las que realmente quiero que se vayan no lo hacen.
-No lo hacen porque son tu familia.
-Quisiera ser independiente, ser feliz.
-Todo a su tiempo.
-Ya se terminó el día, quiero dormir.
-Eso es lo único que quieres, dormir para siempre.
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CAVANDO MI TUMBA
Teen FictionUna portada feliz para una historia triste... Esta es mi primera obra inspirada en mi presente, un poco difícil pero cierta. Ayudame compartiendo estos pensamientos entre tus amigos, gracias por leerme.