QUIZÁS, A PESAR DE TODO.

DECLARACIÓN DE GUERRA

Habían transcurrido dos días desde que Kakashi le menciono que rompería su compromiso, pero eso no era lo más importante ahora. Desde el descarado ataque al Hokage el número de Ninjas heridos había ido el alza, provocando que no tuviera descanso alguno, por lo tanto no podía realizar sus labores junto a él.

Aunque no podía evitar el querer saber si su compromiso ya no existía, por ello tenía planeado ir a verlo a lo que su turno terminara, en 20 minutos.

Pero: ¿Cómo le preguntaría sobre ello?  Él sin duda se daría cuenta de lo ansiosa que la tenia, que eso incluso le quitaba el sueño y la distraía de todo deber a momentos. 

Sin embargo recordaba la confianza plena que tenían en sus habilidades médicas, lo cual hacía que se esforzaba al máximo. 

¡Por kami! Se había jurado no volver a perder la cabeza por un hombre.

(...)

El bosque le parecía eterno, perdió la cuenta de cuanto llevaba corriendo. Su visión era borrosa,  su ojo izquierdo sangraba. Su herida anterior se abrió por el esfuerzo que le provocó pelear con aquel escurridizo Ninja, que justo ahora seguía. 

{Flashback} 

Aún no amanecía. 

Él y otros especialistas rondaban las sombras del bosque, estaban en alerta. Él enemigo  se había dejado ver, Kakashi no lo pensó dos veces, utilizo su antiguo uniforme ANBU y reunió a los mejores.

Pasaron cerca de tres horas combatiendo, uno a uno los ANBU iban cayendo, finalmente sólo quedo en pie el hombre de cabellos plata, con habilidad y algo de suerte pudo evitar cada ataque, no volvería por ninguna manera a dejarse herir por él. 

Observó bien cada uno de sus ataques, era lo único que podía hacer debido a que no podía ver su rostro, ni su cuerpo, su oponente llevaba una mascara negra y estaba envuelto en telas del mismo color. Pero aún así no podía evitar pensar que le recordaba alguien, de alguna manera sabía que la energía que emanaba ese Ninja, le era familiar. 

Aprovechó un descuido del enemigo para usar su Shiden, sabía que lo dejaría exhausto pero le daría gran ventaja. Tras recibir el impacto casi de lleno en un lado del pecho y brazo, su oponente hizo uso una cortina de humo para lanzar un kunai con explosivo y huir del lugar.

El kunai dio casi por completo en su objetivo, el ojo izquierdo del Hokage, pero de no ser por su rápida reacción le hubiera explotado en la cara. Con un corte por arriba de su párpado su visión no era la óptima, a pesar de ello no se daría por vencido, y terminó yendo tras él.

{fin del flashback}

(...)

Llamó a la puerta pero no hubo respuesta, insistió un par de veces pero nadie respondió. Le pareció extraño, la inquietud atravesó su pecho, giró la perilla con cuidado para echar un vistazo. Los papeles estaban casi como ella los había dejado, a excepción de unos cuantos informes, leyó un poco todos eran clasificados y no eran nada alentadores.

El responsable de las bajas shinobi de Konoha se había dejado ver, eso explicaba porque su ex sensei no estaba en las dependencias del Hokage. 

Salió rápido de la torre, no estaba segura de cómo encontrarlo pero iría tras él, sería arriesgado, pero tampoco se iba a cruzar de brazos esperando que llegara, quizás en que condiciones se encontraba.