Un bobo enamorado💫

CAPÍTULO 1: Era un día normal...

Era un día de verano aparentemente normal, la temporada, que había sido sido de un gran salto personal, ya había acabado, por lo que estaba en período de vacaciones, pero me gustaba mantenerme en forma, y iba frecuentemente al gimnasio.

Me preparaba para un día más de entrenamiento, como de costumbre, pero por sorpresa me llegó un mensaje de mi madre, el cual decía :

Empieza la conversación.

-Madre de Regui- Hola hijo, ¿Qué tal? Estoy muy orgullosa de tus logros esta temporada, has logrado ser titular en el Real Madrid, el club de tus sueños, ¿estarás muy contento no? Ya deseando que empiece la próxima temporada, conociéndote jajaja...

-Regui- Hola mamá, bien, aquí estaba preparandome para salir a entrenar, para no variar jajaja, muy contento de lograr lo que he logrado, aún no me creo que haya tenido el honor de defender los colores del equipo de mis amores, estoy muy entusiasmado por que llegue la próxima temporada para seguir cumpliendo objetivos... ¿Y tú como estás?

-Madre de Regui- Desde luego hijo, no paras jajaja, sabes que tu madre siempre estará aquí cuando te haga en falta, sobretodo para celebrar tus victorias y ayudar a levantarte en tus derrotas... Estoy bien, pero quería comentarte una cosa...

-Regui- Muchas gracias mamá, tu apoyo siempre será fundamental para mí ¿Qué ocurre? (pregunté extrañado)

-Madre de Regui- Te quería preguntar, porque me ha llamado una amiga para que me pasase por el cumpleaños de su hija, creo que la conoces, podías aprovechar y venirte para despejarte un poco hijo, y así nos vemos y estamos un rato juntos, que cuando no estás dandole patadas al balón, te pasas el tiempo en el gimnasio

-Regui- Claro mamá, sabes que soy muy maniático con el gimnasio, pero por un día no importa... Y además tengo muchas ganas de verte, ¿A qué hora sería?

-Madre de Regui- A las 19:00, vente para casa cuando estés listo y vamos juntos en coche, que nos pilla un poco lejos

-Regui- Vale, en cuanto me prepare me dirijo hacia casa

-Madre de Regui- En un rato nos vemos.

Final conversación.

Estaba entusiasmado, hacía mucho que no veía a mi madre, ya que la vida de un futbolista es, a veces, demasiado ajetreada, y tenía muchísimas ganas de pasar tiempo con ella, me quité mis deportivas y me dirigí hacia la ducha, aún no sabía que me pondría, no tenia idea de con quién me encontraría, por lo cual debía ir bien vestido, aunque me quede pensando en lo que me dijo mi madre respecto a lo de que conocía a la hija de su amiga, pero en ese momento no le dí mucha importancia y me dispuse a terminar de prepararme.

Una vez preparado, me terminé decantando por el traje de chaqueta que usé el día de mi presentación con el Real Madrid, tenía pensado guardarlo para bodas u ocasiones especiales, ya que solo lo había utilizado aquella vez, pero no sabía que ponerme, pensé que iba a ir demasiado formal, pero ya se hacía tarde y tenía que dirigirme a casa de mi madre.

Una vez allí, vi a mi madre y a mis hermanos pequeños, los echaba mucho de menos, le di dos besos y un abrazo a cada uno, en cuanto terminé de saludarlos, pregunté a mi madre:

-Regui-¿Dónde tenemos que ir mamá?

-Madre de Regui- A un local, a las afueras de la ciudad, por eso te comenté que te vinieras para ir juntos en coche, ya que está un poco lejos de aquí

-Regui- Ah bueno, parece buena idea, y dime (aún pensando en aquello) ¿quién es aquella chica que me has dicho que conocía?

-Madre de Regui- Es la hija de mi mejor amiga, la conoces porque los dos habéis estado muchas veces juntos desde pequeños, quizá ahora mismo no recuerdes, pero seguramente cuando la veas te refrescará un poco más la memoria, tú tranquilo que yo se que tú eres muy tímido, pero poco a poco hablaréis, ya verás.

(Nos dirigíamos al cumpleaños en el coche, cuyo local tardamos unos 15min apróximadamente en llegar).

Salí del coche muy tímido (como de costumbre en mí) y ví muchísima gente, no sabía hacia donde dirigirme, simplemente me propuse actuar normal y sentarme junto a mi madre, por el momento, a observar la fiesta, mi madre estaba hablando ya con su amiga, y ella se daría cuenta de mi timidez, ya que me invitó a tomar un refresco para romper un poco el hielo.

Acepté por ser educado y social, ya que yo no era muy partidario de tomar refrescos, ya que soy muy ciudadoso con mis dietas, entonces me dirigí hacia la zona donde se encontraban los refrescos...

De pronto, me encontré con una chica...