Todo estaba cayendo en su lugar. Incluso los Volturi parecían aceptar el nuevo estado de Bella. Aunque eventualmente querrían pruebas. Parecía que solo nos quedaba un enemigo, el Tiempo. Renesmee estaba creciendo demasiado rápido. A todos nos preocupaba cuánto tiempo tendríamos con ella. Simplemente hizo cada momento más precioso.
"Oh, Dios mío", eso fue lo único que pude decir. No pasaba nada más por mi cabeza, solo las palabras, oh Dios mío.
Desarrollé el hábito de vomitar la semana pasada, no se lo conté a Carlisle porque pensé que era solo un virus estomacal. Resulta que fue más que eso. En este momento, Bella, Jacob y Renesmee estaban saliendo para que Renesmee pudiera jugar en la nieve.
Estoy embarazada.
No sabía cómo me sentía acerca de ser madre, amo a los niños, eso es seguro. Simplemente no pensé que iba a tener uno propio. Pensé que desde que estaba con Carlisle, nunca tendría hijos propios. Acepté eso, tomé a los vampiros del aquelarre olímpico como mis propios hijos. Entonces esto surge.
Sabía que Bella estaba embarazada por Edward, pero mi mente no procesó eso por un tiempo. Mi mente todavía no está procesando que estoy con un niño. Que hay un ser vivo dentro de mi cuerpo, y fue creado por el amor entre Carlisle y yo. No sé cómo reaccionaría, quería que fuera feliz de que tuviéramos un hijo propio. Algo que nunca tuvo y que era humano o vampiro.
Esto también plantea el hecho de que mi hijo sería un hibrido. Que este niño sería un humano, un lobo y una bruja. No quería que este niño estuviera en peligro, no viviendo la vida que yo viví. Lleno de miedo, sin protección, huyendo por el resto de su vida. Sin saber en quién puedes confiar, quién dice la verdad y quién dice mentiras, y sufre la maldición por la que pasé. El resto de la familia también estaba fuera, pero sabía que pronto estarían en casa.
Necesitaba mantener esto en secreto ahora mismo, la vida que vivíamos ahora era demasiado tranquila, algo venía y era algo grande.
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Her Power ➛ Carlisle Cullen
Vampiri"Donde hay amabilidad, hay bondad y donde hay bondad hay magia!