Los peros de mis te quieros.

Barcelona,9 de enero 2020

Cariño:

Sabes que me encantas, todo tu; cómo eres, cómo piensas, cómo hueles, como estás cuando estás conmigo y cuando estás sin estar. Me encanta cuando me miras, de esa forma tan tuya...tan tú, me encanta con la dulzura con la que me hablas.

No quiero poner peros, pero de peros siempre hay algunos, no? Y aquí viene el mío: llevamos ya siete meses juntos y sabes que todos los días lo mismo me cansa, me aburre. ¿Sabes el típico "no eres tú, soy yo", del que tanto nos reíamos cuando lo decían en alguna peli ñoña? Pues ahora lo entiendo y, créeme cuando te digo que no eres tú, que soy yo. Puede que me cueste muchísimo dejarte ir, puede que todos los dias en clase siga girándome para ver qué haces, puede que me arrepienta todas las noches, puede que me mire en el espejo y piense...¿qué he hecho?. Pero creo, sé, que es lo que necesito, lo que necesitamos realmente.

Párate un momento, deja de sentir esa rabia que rodea tu corazoncito y date cuenta de que solo tenemos quince años y no podemos estar atados para toda la vida, mientras los otros son libres y hacen lo que quieren, cuando quieren, donde quieren y con quien quieren. ¡No! No significa que contigo me aburra, ni mucho menos, significa que necesito estar con mis amigos y amigas, no con alguien, que cuando esté él ya no necesite a nadie más y en la vida no interactúan solo dos personas. Sé que me contradigo, porque me gustaría estar contigo toda la vida, pero cuando estamos juntos parece que no haya nadie más alrededor y eso no es bueno, son muchos sentimientos, demasiados a decir verdad y lo peor es que las consecuencias de estos sentimientos las pagas tú y te pido perdón, pero necesito libertad, sabes que es lo que más me gusta en el mundo, mi libertad, mi espácio para mí misma y, si estoy saliendo con alguien, eso no se puede conseguir. También quiero que mis amigas vuelvan a ser mi mundo, no quiero que nos recuerden por con quién estuvimos saliendo en el instituto, sino por nuestras virtudes y nuestros defectos. Y lo siento mucho, porque igual que te duele a t,i a mí aún más, porque no te quiero hacer daño, porque te quiero con todo mi ser y la verdad es que tenemos algo muy bonito que espero que perdure por siempre.

Deseo con todo mi corazón que sepas comprenderme, porque siempre lo has hecho y no dudo que aunque estés enfadado y dolido por mis palabras sabrás darte cuenta de que es lo mejor para los dos. Y aunque me dé mucha rabia escribir esto, siempre, siempre, siempre hay alguien mejor; el reto es conocerse a sí mismo, escucharse y descubrir qué y quien más hay a tu alrededor. Invítate y date el privilegio de aventurarte.

 Con cariño BEA.