Nueva Oportunidad

CAPÍTULO 11: TRES MESES Y LA CONFRONTACIÓN

Blaise se sentía muy molesto, en verdad estaba furioso, pero no podía hacer nada, estúpidos Gryffindor y sus ansias de verdad y justicia, deberían parecerse más a las serpientes que eran más astutas a la hora de revelar la información, pero noooo, ahí estaba Theo confesándole todo a su marido...aunque ¿Si hubiese sido Ron quien lo descubriera, hubiera actuado igual? Bueno la idea del obliviate era atractiva, pero reconocía que no era la más sensata, Neville tenía razón cuando decía que no estaban tranquilos bajo la sombra de la posibilidad de que algunos de sus seres queridos se enteraran pero la verdad confiaba en que nadie lo hiciera nunca y ahora esto, era una porquería. Llego a casa y encontró a su ahora prometido en la cocina, Ron lo miró con una sonrisa que no alcanzaba sus ojos, seguro por haberlo dejado de esa forma

-Vámonos de viaje- dijo sin pensar

-¿Que?- el pelirrojo lo miro confundido

-Adelantemos nuestra luna de miel y vámonos, no le digamos a nadie y huyamos unos días lejos de todo

-Pero cielo, eso no...-empezó Ron pero ahora si sonreía con alegría

-Solo será por ahora luego no sabemos qué pueda pasar que nos lo impida- Ron rió y se abrazó a su prometido

-Es una idea magnífica

-¿En serio?- Ron sonrió enternecido por el tono de su novio

-Claro que sí, escribamos una carta a nuestras familiar y vámonos dos semanas – dijo besándolo, Blaise hizo un puchero

-¿Solo dos semanas?

-Máximo tres, debemos volver a trabajar- respondió riendo, Blaise también sonrió, lo tomaría, luego podría estar con sus padres

-Cuando volvamos, debemos visitar a tu familia- Ron lo miró enarcando una ceja

-Creí que no te gusta ir

-Pues no mucho pero son tu familia después de todo- un nuevo beso mucho más pasional se instaló en sus labios

-Salimos en una hora

-Claro que si- Unas horas después ambos estaban en un hotel al lado de un paraíso tropical tomados de la mano y viviendo una nueva experiencia

Hermione pensó que aquello era muy cruel, ella apenas llevaba unos meses de conocer a Orión pero ya podía entender porque lo había elegido, además que estaba segura que tenía fuertes sentimientos por él, de hecho muchos más de los que tuviera alguna vez por Ron, por otra parte ella se encontraba en desventaja frente a los demás, Blaise se quejaba de que Ron lo dejaría pero el pelirrojo era un Gryffindor y perdonar estaba en su ADN, pero no en el de un Slytherin, ellos no perdonaban y ella era la única de todos que en verdad podía terminar sola, puesto que una vez que Orión supiera todo aquello, seguro que no la perdonaría, además estaba el tema que los demás por lo menos se conocían, pero ellos sólo llevaban esos meses conociéndose, era casi imposible que su relación se salvara, se sentía muy dolida de pensar en aquello, así que no pudo evitar las lágrimas por el hecho de pensar en el fin de su relación, aunque también entendía la petición de Draco, no iba a llorar más y en vez de eso, disfrutaría estos tres meses con su prometido y con sus suegros, porque seguro una vez supieran todo, ya no los vería más. Apenas llego a casa busco a su novio pero no lo vio, recordó la comida en casa de los Potter, de donde habían salido Harry y Draco, entonces pensó en prepararle una sorpresa, arreglo toda la casa y luego se puso una sensual lencería, con solo aquello lo espero en la cama, el tiempo se le paso pensando en qué hacer en estos meses

-¡Mione!- prácticamente gimió Orión cuando entro a la habitación, pensó que su novia ya estaba dormida, sin embargo la chica se levantó y de forma sensual fue hasta él