"Lo Difícil Que Es Amarte"

Capítulo 1

Caleb un chico de 19 años, no es el tipo de persona que hable del "amor", a decir verdad, él no cree en ello o más bien en que dos personas se enamoren de tal forma que su cariño mutuo perdure; Opina que es tonto, sobre valorado, algo totalmente sin sentido y por lo cual, deberías estar tan estúpido para caer en aquel lugar. Una de las razones por la que no le interesa una "relación en pareja" es porque ha visto que a sus dos amigos Jessica y Josh no les va de maravilla; Además de que su último "noviazgo" resultó no ser tan favorable; otro dato que siempre ha tomado como claro ejemplo de que el amor es una tontería, es el matrimonio de sus padres. Ellos discuten día y noche, se han dicho de todo, lo que no le extraña, pues, ha sido así desde que tenía seis años.
Él prefiere evitarse eso de los líos amorosos, palabras cursis, desveladas innecesarias; pero sobre todo un gasto "extra" de dinero que perfectamente podría ahorrar para su futuro o inclusive para autoconcentirse.
Estaba más que seguro que si algún día se llegaba a enamorar debería haberse vuelto loco por tanta tarea o seguramente sus amigos lo habían sometido a drogas, lo cual le afectó parte del cerebro y por eso se sentía de tal forma, lo decía puesto que para él era algo completamente imposible, ya que después de haber pasado diecinueve años sin haberse enamorado lo hacía sentirse inmune o poco propenso a caer ante el amor.
Sin embargo, para su "buena fortuna" no contó con algo o más bien con alguien, no sabía que encontraría a una chica peculiar, amable, bastante linda y muy simpática llamada Zoey, lo cual cambiaría su vida con su llegada. Pero, ¿será que realmente llegue a enamorarse? O quizás sería lo mismo que con su última relación, ¿de qué forma una chica podría cambiar a Caleb? Qué es lo que su mente le dirá y qué es lo que hará.

Estaba en una batalla entre ir a la escuela o quedarme en casa, tal parece que no debí ir con Josh a esa fiesta, pensé.
Entre mis intentos por levantarme finalmente me puse de pie y bajé al comedor por una pastilla, la cabeza literalmente me punzaba. Como era de esperarse de nuevo mi madre y mi padre peleando, definitivamente ir al colegio era menos irritante. Sin dirigirles palabra alguna tomé una pastilla para que se me bajara el dolor de cabeza. Comencé a buscar algo para desayunar e irme, tomé lo primero que vi, "cereal con leche", fui por un tazón y una cuchara, ellos seguían en lo suyo, procedí a servirme la gran comida del día y devorarla en cuestión de minutos, me levanté de la mesa, lavé los trastos utilizados para después, darme una ducha y tomar una prenda un tanto habitual para mí, me bañé, vestí y me cepillé. En lo que tomé mi mochila pude escuchar el típico portazo de papá, lo que significa que había salido. Salí de mi habitación no sin antes tomar mi móvil, al estar por irme sentí la mirada de mamá, me dirigí hacia ella y le planté un beso en la frente al mismo tiempo que le dije:

-Te quiero mamá, ya me voy.

-Cuídate hijo, también te quiero.- Respondió.

Salí de casa me coloqué mis audífonos y comencé a caminar con la canción "Yellow" de Coldplay retumbando mis tímpanos, tras haber escuchado dos canciones llegué al instituto en donde como lo imaginé Josh y Jessica me estaban esperando.

-¡Cielos, viejo, te ves horrible!.-Dijo Josh.

-Tú no te ves hermoso que digamos.- Dije.

-De nuevo salieron.- Esta vez habló Jess.

-¿Qué esperabas? Él se vuelve insoportable cuando quiere algo.-Dije antes de ser regañado por Jess quien se encontraba matándonos con la mirada.

-¿Qué? Sólo quería sacar a pasear a Caleb.- Se defendió.

-En primera no puedo creer que sean tan idiotas y en segunda, Caleb no es un perro.- Dijo Jessica revirando los ojos.

En eso sonó el timbre.

-¿Entonces, no entramos?.- Preguntó Josh como el torpe que es.

-¡Josh, deja de ser tan torpe!

-¡Vamos!.-Dijo Jess.