Eran las 4 en punto de la madrugada y como de costumbre me había despertado puntual.
Insomnio, estrés, algún llamado espiritual, la verdad es que no sabía lo que era. Muchos le han querido dar un nombre, una causa o una cura a mi “problema”.Pero en las noches como ésta, donde la luna brilla en su mayor resplandor no me parecía que fuese un problema sino una bendición.
Me llama, la luna me llama. Hay veces que parece que está triste y lloro con ella, otras noches se alegra de verme y me contagia con ese amarillo fulgurante.
Me abraza y me conforta.
¿Qué quieres de mí, hermosa Artemisa?, ¿Hay algo que debas decirme? Sé que lo hay, si no, no me explicaría la manera en la que me exiges que te dé mi atención.
- ¿Así que esperas que al escribirle una carta a la luna dejaras de despertar en la madrugada?
-Exactamente.
Me encontraba con mi amigo Woongie en la cafetería de la facultad contándole mi maravilloso plan para dejar de desvelarme por las noches. Sin embargo, su cara de póker no me daba la confianza que esperaba de un mejor amigo.
- ¿Y esto es lo que llevas?
-Así es – dije dubitativo.
- ¿Quién te dijo que Artemisa necesita que le escribas una carta? – me contestó con su ceño fruncido – Por Zeus, KeonHee, ¿Pones atención a las clases de mitología si quiera?
- Bueno, sé que es la diosa de la Luna.
HwanWoong bufó y me vio completamente serio – Así sólo conseguirás que te dure más la desgracia, ¿Y cómo se supone que le vas a dar una carta a la Luna? ¿Es posible acaso?
-Ya, ya entendí tu punto, pero sólo es metáfora. ¿okey?
-Lo haces sonar demasiado enserio – dijo con desagrado.
Es que realmente lo estoy diciendo enserio, ¿Escucharás mis palabras, hermoso lucero?
✧*。🌒 。*♡
Otra noche más, pero esta tenía un ambiente diferente. La luna no me decía nada. Bien no es como que hable con la luna, sino que me transmite un motón de lo que yo conozco como sentimientos. Pero hoy, realmente no me está transmitiendo nada.Me acosté de nuevo en mi cama esperando a que el sueño llegara, pero fue en vano. Di vueltas por toda la cama y no parecía haber cambio.
Bien, si no vas a decirme nada, ¿Podrías dejarme dormir?
Ya iban a dar las 5 de la mañana y no lograba descansar un poco, si la situación no cambiaba me la pasaría de mal humor todo el día.
Tomé mi chaqueta y decidí salir al patio trasero. Y entonces lo sentí, ella me llamaba, mis ojos comenzaron a picar amenazando con derramarse. Se fijaron en la pequeña fuente del vecino y como si de una fuerza tomando mi cuerpo se tratara caminé hacia allá.
Miré mi reflejo que el agua me proporcionaba alumbrado por el índigo de la luna. Era como si algo en mi oído derecho me dijera “¿Qué es lo que ves?”.
Confundido observe mi reflejo detalladamente, mi cabello castaño estaba un poco revuelto y caía por mi frente, mis mofletes y mi nariz estaban un poco rojizos por el frío de la madrugada, lo que hacía que mi piel se viera aún más pálida de lo que era dejando atrás el color canela que lo caracterizaba, mis ojos rasgados se veían aún más brillantes y grandes gracias a las lágrimas. Pero al parecer eso no era lo quería que viera, “Más allá” susurraba la voz inexistente.
Mi alma, quería que viera dentro de mí, pero, ¿Qué podía ver?No soy un santo, no creo que haya algo especial en mí. Sólo soy un chico universitario que se desvela con la luz de la luna.
Soy demasiado insignificante, no es como que destaque en las cosas que hago, no creo que sea algo importante, me gusta el arte, amo cantar y pintar. Bueno, Woongie dice que tengo una energía impresionate y un optimismo muy oportuno.¿Eso es lo que quieres que vea de mí? ¿Qué estás viendo tú en mí?
🌙
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Moonchild | GeonHee |
Fantasy¿Qué quieres de mí, hermosa Artemisa?, ¿Hay algo que debas decirme? Sé que lo hay, si no, no me explicaría la manera en la que me exiges que te dé mi atención. - ¿Así que esperas que al escribirle una carta a la luna dejaras de despertar en la madru...