cap1: dónde los hombres de fe guardan el oro

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Despiertas al día siguiente. Estas recostado en el mismo tronco que te sirvió de cuna. Ya el forastero no está y decides seguir tu camino. A medida que la mañana va tomando fuerza, te planteas muchas cosas respecto a la noche anterior. La conmovedora historia y el curioso forastero que te acompañó. Al pensarlo con la mente fría era muy extraño todo, pero al estar ahí, frente a él, era familiar. Sabías que estaba mal hablar con un desconocido tan sospechoso, pero no lo sentías como alguien ajeno a ti.
Te pierdes en tus pensamientos mientras continuas tú viaje.

Después de llevar horas en el camino nuevas imágenes comienzan a cubrir tú vista. Ya no estás rodeado de bosques donde poner una fogata y dormir recostado a un tronco. El paisaje es diferente. Ya no hay grandes conglomerados de árboles y el suelo del camino contiene más piedras procesadas que simple tierra.
Lo sabes, estas abandonando el bosque para entrar en una zona más urbana. Sabes que en cualquier momento te encontraras una construcción de algún tipo. Grande fue tu sorpresa al tener como primer exponente del mundo civilizado a tres hombres que estaban sentados al borde del camino.
Pasas detrás de ellos. Te miran y saludas con la mano. Sigues tu camino.
Uno de los hombres se pone de pie y trota un poco hacía tu dirección. Ya a tu lado se presenta, bajo el nombre de Kamil. Te habla de él y de sus hermanos.
Kamil te pide ayuda, te explica que cerca de aquí hay un poblado abandonado y en él una iglesia. Que él y sus hermanos han intentado entrar para ver que pueden robar. Te cuenta que nadie vive ahí desde hace más de diez años por culpa de una plaga y que la iglesia está sellada desde entonces, que las personas no se atreven a entrar y que está seguro de que dentro habrá alguna riqueza.
Kamil está dispuesto a darte una parte de lo que encuentren. Llevan horas sentados en el camino y eres el primero que ven pasar. Lo han intentado pero entre tres es imposible entrar a la iglesia o por lo menos eso creen.
Te sorprendes ante tal sinsentido. ¿Acaso tienes una suerte especial para atraer desconocidos?
Le pides que se aparte, no lo conoces de nada y por tanto no vas a formar parte de su plan. En definitiva no significa nada para ti. Das la vuelta e intentas seguir tu camino, aguantando los impulsos homicidas que te despierta tal disertación.
Sigues tu camino o por lo menos lo intentas. Kamil molesto con tu reacción empieza a llamar a sus hermanos. Rápidamente te rodean dos hombres más. Ellos mucho más corpulentos que su hermano hablador y dicho de paso, mucho más corpulentos que tú.
Ante ti ya no se encuentra el delgado extraño que pide de tu ayuda. Ahora te frenan el paso dos hombres suficientemente fuertes como para dejarte en tu sitio de un bramido. ¡Eso hacen! El hermano mayor, barbudo y calvo, te pone una mano en el hombro. Te dice que necesitan de tu ayuda y la tendrán quieras o no. Tiene más de una forma de convencerte, argumenta.
Rápidamente entiendes la situación. Ahora mismo no suena tan estúpido haber aceptado de buena gana o, por otro extremo, estamparle la cabeza a Kamil contra el suelo y echar a correr. En cualquier caso, no tuvieras a estos dos gorilas obligandote a "ayudarlos"

Aceptas. Les dices q los vas a ayudar, que no tienen que ponerse así de conflictivos. Les enseñas una sonrisa falsa.
- todo sea por ayudar- dices.
Maldices en voz baja y empiezas tú travesía con ellos.
Así los cuatro salen del camino con intenciones de entrar al supuesto pueblo abandonado.

Kamil se te acerca. Te pide que le disculpes, que no tenía otra opción. Te cuenta q sus hermanos planeaban asaltarte y que la única razón para no hacerlo era tu ayuda.
-Ahora resulta que te tengo que agradecer- le dices con evidente sarcasmo.
Te explica que sabe lo raro que es todo, pero te asegura que si ayudas bien a sus hermanos ellos pueden ser generosos. Con pena te dice que él no quería involucrar a más nadie, pero no tenía otra opción.
Después de una pausa y un suspiro continua hablando contigo.
Ya estás bien al tanto de la situación. Kamil es el menor de tres hermanos, los otros dos se llama Otto e Igram. El alto, barbudo y calvo es Ingram. Mientas que el otro de aspecto más obeso y con el pelo rojo es Otto.

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⏰ Última actualización: Jun 23, 2020 ⏰

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El descanso del forasteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora