Yamazaki Sousuke x Lector [One-Shots]

Salida - V

Mirabas por la ventana, completamente aburrida de oír lo que el profesor de inglés explicaba. Vivías en Japón ¿para qué querrías saber inglés?

Era el quinto suspiro que lanzaste ese día cuando sonó la campana de fin de jornada. Sonreíste feliz y fuiste la primera en levantarte, el profesor te miró con el entrecejo fruncido. Llamó al delegado de la clase y los hizo poner a todos de pie para saludar. 

Guardaste todas las cosas que habías dejado debajo del banco y las metiste en tu mochila rápidamente. Ese día estabas especialmente nerviosa, habías recibido un mensaje muy temprano diciendo que pasaría a buscarte, y no podía tratarse de otro que no fuera Yamazaki Sousuke.

Caminabas lentamente hacia la salida mientras tus amigas te decían cosas por detrás, casi todos en la escuela sabían que estabas saliendo con un chico de otra preparatoria, y que ese chico no era "uno cualquiera", pues Sousuke había hecho varias entrevistas hechas a deportistas jóvenes para  algunas revistas.

Lo viste parado del lado izquierdo del portón y te detuviste en seco, si desde temprano en la mañana te habías puesto nerviosa, como te sentías ahora no tenía nombre. Te gustaba que él fuese tan atento contigo y te acompañara a casa todos los días, pero cada vez te era más difícil hablar con él normalmente.

Los chicos te miraban y rápidamente miraban hacia la puerta, ellos sabían que allí estaba tu enamorado. Tragaste saliva y volviste a caminar cuando viste que Sousuke miró la hora en su reloj de muñeca. Él siempre te esperaba y siempre lo haría.

Cuando estuviste a su lado le tocaste el hombro derecho con suavidad, casi con miedo, pero en realidad eran nervios, estabas tan nerviosa que tus manos temblaban.

Se giró a verte y no tardó en sonreírte, tu cara irradió calor en un segundo. No pudiste ni murmurar un "hola" pues oíste la voz de otra chica que se dirigía al muchacho.

—Siempre vienes aquí, ¿esperas a alguien?—estaba claro que la jovencita no te había visto, pues la gran espalda de Yamazaki te ocultaba; él te tomó la mano y se movió para que la otra chica pudiera verte.

—Sí, a ella—dijo Sousuke sonriendo y refiriéndose a ti, levantando sus manos - ahora -entrelazadas.

La cara de la joven se transformó a una de desagrado, se había sentido humillada y Sousuke no se quedó a esperar a que ella alegara algo más, te tironeó un poco para que comenzaras a andar a su lado.

Habiendo hecho ya dos calles, sentiste que Sousuke apretó un poco tu mano, miraste hacia arriba, a su rostro, él sonreía. Sintió tu mirada sobre él y se detuvo.

—¿Pasa algo?—mostraba confusión. Negaste rápidamente, ¡qué vergüenza te daba la situación!

Él sonrió y se acercó a ti, cerraste los ojos con miedo. ¿Qué iba a hacer? ¿Qué tal si...?

Sentiste la pesada mano del chico sobre tu cabeza y abriste los ojos despacio. Él sonreía y un tierno sonrojo adornaba sus pómulos.

—Gracias...—dijo casi sin separar sus labios.

—¿Por... qué?—fueron tus primeras palabras desde que se habían encontrado.

—Por aceptar salir conmigo—tu rostro permanecía rojo constantemente en su presencia y ahora sentías que hervía como nunca.

Yamazaki se acercó a ti una vez más, bajaste la mirada con inquietud, cerrando los ojos con fuerza y sentiste los dulces labios de Sousuke sobre tu mejilla. Él sabía que no estabas lista...