Odio ser omega (Ayakane)

invitación

Narrador omnipresente

Él trio miro al albino, Ayato se tapó la cara con una almohada, esta sonrojada y no quería que lo vieran, — que vergüenza — dijo detrás de la almohada, sus amiga se rieron y él pobre albino quedo enternecida por el berrinche que hacia él omega, pero no lo demostró.

— ¡ bueno ya salgan de mi habitación ! — grito él menor de los kirishima mientras se quitaba la almohada de la cara dejando ver su rostro, que cabe decir estaba sonrojado hasta las orejas, tenia él ceño fruncido, una mueca de disgusto y para terminar estaba señalando la puerta de esa desgastada habitación, las betas salieron corriendo de ahí, ya sabían como se ponía Ayato si se enojaba, pero él pobre albino que no llevaba mucho tiempo de conocerlo ( no lo suficiente), decidió arriesgarse y quedarse en él cuarto que compartían, — Y tu que, ¿ no te vas a ir también ?— pregunta irritado él mas pequeño.

Kaneki negó y se sentó en la cama, — Oye esa es mi cama — de mando él mas bajo, él mayor giro su mirada al mas bajo, él cúa sentía que le veían hasta él alma con esos ojos grises, — y ese era mi sillón — dijo como si nada él albino, y luego su mirada cambio al escuchar la pequeñas carcajadas de Ayato, el omega soltaba  carcajadas y su risa contagio al mayor él cual también soltó risas mas disimulada pero risas al fin y al cabo.

Una semana había pasado desde ese incidente, y él albino ayudaba en lo que podía al omega, en uno de sus ratos libres se puso a pensar, a recordar cuando era humano, él siempre a sido un alfa y antes era humano, por lo tanto su vida no era mala, era decente,aceptable, él estaba conforme, pero...— Ayato —, es él hermano menor de Touka, la cual era una alfa, pero por lo que le contó ella, ella y su hermano perdieron a sus padres muy pequeños y la vida de un ghoul es muy difícil, aun mas siendo pequeños y dependientes, un poco después de vagar solos y crear desastre Yoshimura los acogió, ella había mencionado que Ayato trabajo como camarero antes de irse, pero que fue acosado por algunos alfas y dejo de ayudar en él café.

Ayato solo tiene a lo mucho 15 años, es un niño, él tiene 18, su cara se agrio por él pensamientos, pero aun así es un alto rango del árbol aoigiri, es muy joven y es omega, — debe ser fuerte — dijo para si mismo con una mano en su barbilla, el sonido de alguien cayendo brusco sobre él techo de ese edificio, — oh, claro que Aya-chan es fuerte, le a dado una que otra paliza a uno que otro alfa — dijo cantarina un beta que estaba envuelta en vendas, — Eto-san — dijo sorprendido él mas alto,  — ¿ eso es verdad ? — pregunto ingenuo, la joven asintió,y aunque no se podía apreciar pero la chica hizo una mueca de disgusto.

— Bueno di le a  Ayato que tiene una misión — dijo la chica envuelta en vendas mientras se levantaba y se iba dando saltitos, él joven alfa se preguntaba como es que ella era un alto mando, pero prefirió guardárselo, al fin y al cabo, — Ayato me sorprende— dijo con una sonrisa mientras miraba las estrellas.

"Pobre chico ", era lo que decían algunas señoras algo chismosas según él criterio de Ayato, Eto lo había mandado a comprar café y algo bonito para él, no es que no quisiera alguna bufanda nueva o una playera, pero, — ¿Era necesario acompañarme? — pregunto con simpleza, ambas betas asintieron con una sonrisa, no era raro ver a Eto pegada con Hinami, y él, pero ¿Kaneki?, esa si no la vio venir, — okey solo vamos por café, al parecer unos supresores para alfa y..... Ya es todo — dijo él menor mientras leía la pequeña lista que le dio tatara.

— Es cierto pero también venimos a comprar algo mas, Aya-chan~— dijeron ambas mientras caminaba a una tienda de mangas, — la verdad no quiero saber que van hacer, así que yo la esperare aquí — dijo apuntando una banca y con una mirada de pocos amigos, — yo le haré compañía — dijo él albino mientras se sentaba alado del omega, el ambiente era silencioso, pero no incómodo,  sin la necesidad de hablar se sintieran bien con la presencia del otro.

La betas cuando salieron y vieron la escena decidieron darles un empujoncito, pero antes se pusieron a oír de que hablaban, eran unas completas metiches, él albino algo decidido bajo un poco su mira para ver al mas bajo, él cual estaba metido jugando en su celular, trago saliva y algo nervioso pero sin demostrar empezó. — Oye, Ayato...¿Estas libre él sábado en la tarde ? — pregunto neutro pero con un toque nervioso y un ligero sonrojo, si bien su personalidad cambio un poco, seguía siendo Kaneki Ken, él chico des adaptado que casi muere en su primera cita, él omega lo miro sorprendido, — si, por él momento — respondió ingenuo sin despegar la vista de su juego, — sera que ¿ quisieras ir conmigo a una cita ? — pregunto un poco inseguro, él menor giro su cabeza con una gran sonrojo, la boca abierta y los ojos como platos, — ¿e-enserio?— pregunto dudoso con un pequeño tartamudeo, — claro que si Ayato — dijo él albino con una sonrisa mientras se acercan al mas bajo, y en él momento que sus frentes se tocaron y una sonrisa se presento en sus bocas, algo paso, la escena era muy tierna para la mayoría de los presentes, pero.

De un movimiento algo brusco, empujaron a Ayato, haciendo que sus labios se tocaran, ambos sorprendidos y sonrojado, pero aun así las cosas pasan por algo ¿no?, hicieron caso a esa señal y profundizaron el beso, era un beso tierno, inocente y lleno de amor, era un beso puro, sin rastro de lujuria, él omega país sus manos por él rostro del albino, él cual abrazo a Ayato. Unas cuantos metros se encontraban Eto y Hinami mientras usaban unos pañuelos por tapar su hemorragia nasal, y veían encantadas la foto que le tomaron a ese par.

Me gusto él resultado, perdón por no haber actualizado espero disfruten él capitulo. Bye~.