Canto primero. Poesía que se escapa.

8 2 0
                                    

Un poeta exige el mundo fiero
Cuando una perpetua noche sobreviene
Con inminentes fobias y álitos de mortajas
Un poeta que no sepa el camino de regreso
Por la estela del odio consumado
Por la insólita raíz del orgullo y el sufrimiento
Por el oscuro túnel del pasado.
El mundo calmo clama un poeta
Con el sol ardiendo en sus entrañas
Con la vida que revolotea entre
Arbustos, aromas y sábanas
Un poeta que sepa el idioma del viento
Y la sed de alegrías de las almas
y sienta desde la tierra irrumpir
el milagro de las puertas, el sonido
de los yunques, los llantos y las campanas.
¡Cuánto hay de centinela en el poeta
Y cuanta poesía que se escapa!

Cantar del CentinelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora