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━ RESUMEN // Jisoo y Lisa son las más cercanas de las amigas, sin embargo, en una noche llena de nostalgia las dos cruzan una linea que ellas mismas nunca se vieron capaces de traspasar.
━ GENERO // romance (♥) , algo triste(☹) (perdón)
━ ADVERTENCIAS // un poco triste, relación homosexual (duh)
━ PAREJA // Lisoo (Jisoo ❤ Lisa)
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Podía todavía sentir el retumbar de la música en mis tímpanos, incluso cuando Lisa y yo ya nos encontrábamos en mi casa. Nuestras risas siendo la única melodía que llenaba aquel diminuto espacio con algún tipo de contento. Podía sentir un leve dolor en la comisura de mis labios de tanto sonreír, mi estomago se retorcía ligeramente de dolor debido a todas aquellas carcajadas que Lisa y yo habíamos liberado durante estas ultimas horas. Ambas estábamos levemente embriagadas en felicidad, con nuestras mentes destellando, en aquel momento era como si todo el mundo fuese un aparte a nosotras, nuestra compañía siendo suficiente como para saciarnos por décadas a porvenir. En aquel momento nuestras mentes estaban demasiado preocupadas con tener un entendimiento mutuo de olvidarnos de todas aquellas cosas malas, dejando todas nuestras ansiedades y dolores fluir fuera de nuestro cuerpo, como algún tipo de recompensa por todos aquellos dolores que estaban por insertarse en nuestra vida en un futuro no tan lejano. Esta era nuestra ultima salida oficial como amigas, habíamos organizado cada detalle perfectamente para disfrutar el último momento que íbamos a tener juntas antes de partir y dejar toda nuestra inocencia de la juventud y convertirnos en adultas realizadas, una parte de mi se sentía aterrada de pensar en una vida sin Lisa, sin embargo, sentía un pudor increíble de tan solo pensar en comentar esta inseguridad a Lisa, quien se veía de lo más feliz en este momento. No quería arruinar esta última noche con preocupaciones estúpidas.
Así que me reí incontables veces, mientras anécdotas pasadas volvían a mi memoria al oírlas escapar de los labios rosados de Lisa. Mientras las horas corrían en el reloj, el tiempo no siendo misericordioso con nosotras y no parando ni siquiera por un segundo más, era como si el tiempo supiese que esta era uno de nuestros últimos momentos juntas y, por lo tanto, se frotaba las manos con una sonrisa maquiavélica y hacia que las manijas de los relojes corrieran más rápido, solo para fastidiarnos.
