Desnuda tu alma

Capítulo 9: Lucky

"Lucky"

[...]

What could I say to you except, "I love you".

And "I'd give my life for yours".

I know we are... we are the lucky ones, dear.

[...]

How could I ever love another, when I miss you every day...

Remember the time we made love in the roses?

How could I ever get over you, when I'd give my life for yours.

[...]

I thank god for you in each and every single way.

We are the lucky ones, dear...

(*Lucky, Biff Naked)

ooOoo

Unas horas atrás, todo parecía sencillo para Valentina Carvajal. Tenía un plan: hablar con Tony Larrea explicarle la razón por la cual no se casaría con él, mientras Lucia, Renata y Carla localizaban la agencia de Strippers para encontrar a Queen B y confirmar lo que su corazón sabía de antemano.

Ahora de pie, frente a uno de los edificios de la colonia Condesa donde se encontraban las respuestas, no lo era.

La plática con Tony no fue fácil. Valentina lo estaba lastimando al romper su relación a casi dos días de la boda, explicó lo sucedido la noche anterior, no los detalles íntimos (aquello lo lastimaría aún más), pero si le contó su sospecha de que Queen B "La Stripper" era Juliana Valdés.

Tony la miró con lágrimas sin derramar con una sonrisa melancólica. Sonrisa que quedaría en su memoria por largo tiempo.

-Ese era mi mayor miedo - dijo Tony - Que un día alguien parecido a Juliana apareciera y te alejara de mí.

Con esas palabras Valentina no pudo detener las lágrimas, Tony no se merecía ser lastimado de esa forma. Ella lo amaba, pero no de la forma en que su amigo se merecía. El muchacho sabía que Valentina nunca amaría a nadie más, solo a Juliana Valdés. Una parte de ella había muerto el día en que secuestraron a Juliana y días después confirmaron su mayor miedo. Valentina nunca había vuelto a ser la misma, por más que tratara de aparentar con sus seres queridos, solo era una fachada, cubriendo su infierno interior.

Tony siempre lo supo, pero su amor por ella lo había hecho esperar. Quizás ella nunca lo amaría al grado en que amaba a Juliana, pero si lo suficiente para vivir el resto de su vida junto a él. Él la amaba, la había amado siempre, ahora una desconocida en un par de horas había logrado lo que él en años no pudo, le había dado esperanza, felicidad y una motivación.

La abrazó, los sollozos de Valentina se mitigaban en su pecho hasta cesar lo suficiente.

-Te amo Tony.-

-Lo sé. Pero no... no estás enamorada de mí.-

-Lo siento -

-Shh... siempre te voy a amar Valentina... siempre - dejando un ligero besos en su labios.

A Valentina se le rompió el corazón de nuevo, rogó porque Tony encontrara a una mujer digna de él. Respiró profundamente regresando a la realidad de su situación. Aún horas después le dolía pensar en su amigo.

-¿Estás bien? - preguntó Lucia junto a ella.

-Si - mintió a la ligera, mientras acomodaba el chal largo que caía de su hombro. Ninguna de sus amigas le creyeron del todo.