𝓉𝓌ℯ𝓃𝓉𝓎 𝒻ℴ𝓊𝓇

356 35 16
                                    

Había pasado un mes desde la última vez que Yena vió a sus padres y parecía que nunca los volvería a ver.

Eran las seis de la mañana y Yena no dejaba de darle vueltas al asunto mientras tenía abrazada a Yuri, durmiendo como un completo angelito.

Le iba a doler lo que iba a hacer, pero tenía que ser así. Dejó a un costado a Yuri y después de haberse cambiado se dirigió a abandonar el apartamento.

Sus lágrimas corrían y corrían, no quería pero debía, sus padres le habían amenazado.

Llegó al aeropuerto y se encontró a sus padres en la entrada.

—Ahí estás —dijo su madre extendiendo los brazos—, menos mal que has entrado en razón, sabía que ibas a lograrlo.

Yena no dijo nada, tampoco llevaba ninguna expresión es su cara y solo dejó que los brazos de su madre la rodearan.

—Os odio —soltó Yena—. Siempre me estáis obligando a hacer cosas que no quiero. ¿Cuando cambiareis?

—Mi amor, la que tiene que cambiar eres tú.

El teléfono de Yena sonó, era Sihoon. Se apartó del lado de sus padres para poder responder.

—¿Qué crees que haces? —sonó enfadado Sihoon.

—¿Como que qué hago?

—Te estoy viendo y no me gusta que abandones a Yuri, ¿despues de todo lo que habéis luchado ahora la vas a dejar? ¿Tan cobarde eres?

—Espera, ¿como que me estas viendo?

—Bueno, quería daros una sorpresa, pero al final la sorpresa me la has dado tú a mí. Deja a tus padres y ves con Yuri, sabes que es el camino más feliz.

—Pero no el más fácil Sihoon, estoy harta de todo, me rindo y ya está, no pienso más —dijo con las lágrimas saliendo.

Y ahí estaba, Sihoon abrazando a Yena, diciendo que siguiera su corazón y que no se rindiera, porque al final todo tiene compensación.

—Yena, ves preparandote —dijo la madre cortando el precioso momento que estaban teniendo aquellos mejores amigos —. Ugh, tú —dijo asqueado cuando se dió cuenta quien era la persona que estaba abrazando a su hija.

—No, no voy a ir mamá —dijo primeramente tranquila.

—Vamos Yena, ya has visto que al final siempre vuelves a tus padres, no eres más que una niñita indefensa que solo busca algo de compañia, no sabes hacer nada por ti misma.

Yena no dijo nada, solo dió media vuelta para desaparecer de ese aeropuerto, no sin antes decir:

—Cuando por fin me apoyes, me llamas madre. Aunque no has hecho mucho ese papel para mí.

Una vez dicho esto se fue con Sihoon hacia casa de Yuri, tenía miedo de como pudiera estar, no quería que sufriera más por su culpa. No más.

-♡-

Holiis

gracias por todo el apoyo de estos últimos meses, ya se va acercando el final.

perdón por no haber actualizado antes, había tenido un bloqueo y no sabía como salir de ahí.

*dadle a la estrellita si os ha gustado

byeee🧡

𝐈𝐍𝐍𝐎𝐂𝐄𝐍𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄 ; yenyulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora