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El despertador sonando nuevamente, tocando una tonada estridente que garantiza al oyente despertar con los nervios de punta. No queda de otra, porque si cambiaba el tono a otro más suave no había manera de amanecer. El rubio cenizo despertó maldiciendo entre murmullos. Con su habitual mal humor mañanero fue al baño a ducharse (con agua fría, pues en casa no había dinero para el gas hace una semana).

Luego de lo anterior, procedió a despertara su hermanita menor. A ella si la despertaba con calma y paciencia, no merecía tener una mañana de mierda el primer día de clase. Con dulzura la pequeña abrió sus ojos y su hermano la condujo hacia el cuarto de baño para lavarse los dientes juntos. A ella su madre la bañaba por las noches, por lo que eso era suficiente.

Ambos prepararon sus bolsos para iniciar sus respectivos años escolares. El chico vistió a la pequeña con un abrió verde y la cubrió con una bufanda rosa. Él vistió su acostumbrada chamarra naranja y su mascarilla facial negra. Kenny iniciaría su penúltimo año de secundaria, mientras Karen iniciaría tercero de primaria. De la mano, el hermano mayor guiaba a su pequeña hermana hacia su escuela.

Una vez Karen fue recibida por su maestra, se despidió y camino hacia la secundaria. Antes, tomaba el transporte escolar con sus amigos pero este año no podía darse ese lujo, porque su hermano mayor Kevin estaba iniciando la universidad y, aunque había recibido una buena beca, no incluía los materiales de sus estudios, por lo que sus padres estaban ahorrando todo lo que podían para apoyar al universitario.

La caminata fue rápida y amena. Llegó a la secundaria, encontrándose a sus compañeros de todos los años; Bebe andaba de la mano con Clyde, ambos con ropa de última moda. Craig y Tweek estaba juntos conversando amenamente, cuando notaron a Kenny, se saludaron con un apretón de manos. Al avanzar un poco más, encontró a su pandilla: allí estaba Kayle, Stan y Eric hablando sobre quien Dios sabe, pero evidentemente debe ser un chisme, porque el gordo estaba gesticulando a todo lo que daban sus brazos.

-¡Te lo digo, judío de mierda!- decía Eric a todo pulmón-¡Tenemos estudiante de intercambio! ¿Qué hare su resulta ser otro judío de mierda?- simulaba un tono deprimido.

Esa última frase activaba la verborrea de Kyle contra el gordo. Me acerqué, saludando a Stan quien me saludo con el tradicional choque de puños.

-¿Kenny! – habló Eric al verme, a lo cual solo le respondí saludando con el saludo de choque de puños, que tanto él como Kyle respondieron -¿sabes que tendremos estudiante de intercambio! Espero que no sea judío, ya le recé a JesuCristito-

-¡Que te jodan!- gritó Kyle para volver a enfrascarse en la vieja discusión. Stan se volteó a verme.

-Que mal que no puedas venir en el trasporte con nosotros, es extraño estar solo los tres, broh- dijo Stan, quien puso su carita de cachorrito.

-No pasa nada, de todas formas tengo que apoyar a mi hermano. Y aprovecho de pasar un poco más de tiempo con Karen-

-¿Quién diría que la leyenda playboy de la secundaria es un sencillo hombre del hogar?- comentó riendo Stan. Solo se le escapó una suave risa en respuesta.

Es cierto, desde que inició secundaria Kenny fue la comidilla de las clases. Una vez tuvo la genial idea de traer una revista porno que encontró en el cuarto de Kevin. Como era una excelente persona compartió ese tesoro con todos los chicos del curso. Repentinamente, los rumores derivaron desde que trajo una revista, hasta que había estado con una trabajadora de pasitas en la trastienda haciendo "cosas de adultos" (técnicamente era verdad, estaba arreglando una de las máquinas de bebidas. Lexus estaba allí para indicarle cual era la falla), que estaba con una mujer casada (en uno de sus trabajos temporales tuvo que acompañar a una señora a su casa con las bolsas de la compra, ya que estaban muy pesadas y le ofreció una buena propina por el favor), y un sinfín de historias de índole sexual.

Bunny - Bienvenida primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora