amor

85 13 12
                                    

Eva siempre se había preguntado qué era el amor. Nunca lo tuvo claro. Para ser justos, tampoco lo había experimentado nunca. Sabía que sus padres la querían, pero no se lo demostraban. Sabía que Rafa la quería, pero ella no era capaz de verlo.

¿Pensaba que las estrellas la querían? Pues tal vez se equivocaba, porque, ¿cómo va a saber lo que es el amor?

¿Es el amor los clichés que te imponen en las películas? ¿En los libros? ¿En las series? ¿O tal vez el amor que derrochaban la mayoría de canciones que escuchaba?

Todas las películas que vio a lo largo de su vida, siempre acabaron bien. Las tramas básicas, los finales felices... ¿Era eso lo que debía esperar para ella? ¿Y si no se sentía capaz de amar?

Todos los libros que leyó... de una manera o de otra terminaban bien, con felicidad.

Nunca había leído algo con un final triste. Pero ella bien sabía que existían. Y tenía miedo. Miedo de que su final no fuera feliz. Tal vez el no haber visto ni leído ninguno, significaba que el suyo iba a ser el primero.

Y bueno, ¿si lo fuera, qué? En el fondo sabía que se lo merecía. No se sentía digna de un final feliz.

Y es que... ¿En sus veinte años de vida, qué había conseguido? Nada. Sólo problemas. Para ella y para su entorno. No era capaz de hacer nada. Hasta los suicidios le salían mal. Siempre decepcionaba a alguien. Hasta que un día sólo le importó decepcionarse a si misma, vivir con la presión que eso conllevaba, pues sentía que lo hacía constantemente.

Se decepcionaba a ella misma, sentía que decepcionaba a la espuma de las primeras olas de la madrugada que acostumbraban a acariciar sus pies. Que siempre estaban ahí.

Sentía también que decepcionaba a las estrellas, ellas habían puesto un rayo de fé en ella, pero no sabía como utilizarlo, no sabía qué hacer.

Un leve roce sobre su mejilla derecha disipó sus pensamientos en un instante.

—¿En qué piensas? —susurró Rafa, acariciándola como si de una pieza de cristal se tratase, con delicadeza.

—¿Te puedo contestar en un rato? Es que todavía no lo sé.

—Por supuesto, ¿te molesto aquí? —le preguntó angustiado, separándose para no agobiarla.

—No. Desde luego que no. ¿Puedo pedirte algo? —le preguntó cuando se tumbó en la cama de nuevo.

—Lo que sea.

—Abrázame, porfa.

Rafa sonrió y acomodó sus brazos a su alrededor, acercando su cabeza hasta su pecho, dejándola reposar mientras la sujetaba, dispuesto a no soltarla nunca.

—Gracias.

—Por nada.

¿Sería esto el amor? Siempre que él estaba a su lado, se sentía llena, segura. Sus pensamientos intrusivos no se atrevían a aparecer. Sabían que junto a él, no había lugar para ellos.

Decidió preguntárselo.

—¿Rafa?

—Dime.

—¿Te puedo hacer una pregunta?

—Todas las que quieras. Por favor —le contestó apretujándola contra él un poco más.

—Antes, me has preguntado en lo que estaba pensando, y tengo dos preguntas. La primera, ¿tú sabes lo que es el amor?

Rafa se quedó ligeramente anonadado, sin saber qué contestar.

—Pues... creo que sí. A ver, no tengo una definición concreta, pero supongo que sí sé lo qué es, al menos a mi parecer —le comentó mirándola a los ojos, viendo en ellos una urgencia por que continuase.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 28, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

pinceladas; rafeva one shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora