Y el Hombre paseaba por las calles de tierra donde el polvo se acumulaba en cada esquina, junto a los centenares de autos abandonados que reposaban como cadáveres de tiempos arcanos.
Los esqueletos de las casas se mantenían en su lugar tal como los antiguos hombres lo habían establecido, aunque las puertas y ventanas permanecían expectantes al regreso de las personas que, con desesperación, las habían dejado así: el sonido del viento seco en las instalaciones producían llamados a sus viejos habitantes en un eterno aullido solitario.
Sobre cada mueble retozaba el polvo del olvido, afirmando su huella sobre cada rincón del mundo hasta convertir el todo en la nada. El vacío de algo que fue pero que ya no es, ni nunca será.
Y mientras el Hombre reflexionaba sobre lo que hizo y lo que puede hacer aún, el eco de sus pasos en la tierra fue acompañado por un alegre silbar.
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ESCRITOS DE BAÚL
Short StoryHay algo que llamo El baúl de los recuerdos: es ese lugar donde guardamos todo aquello que olvidamos hasta que lo necesitamos. A veces es un lugar físico, a veces no. Puede ser que lo abramos por accidente o que busquemos algo en él desde hace tiemp...
