Capitulo 9

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—¡ANN! Apúrate que todavía hay que pasar por Sam y tu nada más yo bajas.

—¡Te dije que ya voy! Solo me peino rápido y ya...— me dijo al teléfono.

Había estado esperando afuera de la casa de Ann durante media hora. Recuerdan que había escuchado música cuando la llame hace como una hora... pues sí, realmente acababa de salir de bañarse y todavía no tenía listas sus maletas. Y ahora estoy afuera de su casa esperando a que termine de arreglarse.

Mientras esperaba puse música en mi camioneta y prendí el aire acondicionado, que hacía mucho calor.

–¿Bueno?...— contesto mi teléfono.

—Sel, ¿cómo van? Aarón, Chris y los demás chicos ya estamos esperando en la cafetería— era Axel.

El día anterior habíamos quedado en que yo pasaba por las chicas y Axel pasaba por sus amigos, Aarón y Chris iban aparte.

—Si ya vamos, dentro de unos 10 minutos estamos ahí, es que Ann tuvo un inconveniente.

—Ok, no te preocupes aquí nos vemos.— dijo esto y termino la llamada.

—¡ANN!

—Ya voy, ya voy— dijo saliendo de su casa cargando sus maletas.

Me baje a ayudarle a subir las maletas a mi camioneta y salimos rumbo a la casa de Samara.

—Ann, ¿puedes llamarle a Sam y decirle que ya estamos cerca y que esté lista?

—Si, si.

Ann le llamo avisándole a Samara que ya íbamos por ella. No tardamos mucho ya que Ann vivía relativamente cerca de su casa.

—¡Hola chicas!— nos saludo Samara subiéndose a la camioneta.— ¿Donde pongo mis cosas?

Le señale la parte de atrás de la camioneta y al fin salimos hacia las cafetería donde nos encontraríamos con los demás chicos.

(...)

—¡Baby, you light up my world like nobody else!
The way that you flip your hair gets me
But when you smile at the ground it ain't hard to tell
You don't know, oh oh
You don't know you're beautiful...

Las tres íbamos cantando a todo pulmón algunas canciones que nos encantaban, íbamos riendo como locas de todas las veces que desafinábamos pero nosotras siempre seguíamos en nuestro papel de estrellas pop.

—Chicas ya llegamos.— dije apagando la música.

—Ahh... yo quería seguir escuchando a mi lindo Harry cantar...— dijo Ann haciendo un puchero.

—Ann, ¿si recuerdas que ya tenemos 17 años y esas canciones las escuchan niñas de 13 o 14?...— le dijo Sam.

—¡Sam! Como te atreves de decir esas tonterías. Ellos son la mejor banda y no hay algún límite de edad. ¡Yo voy a seguir escuchando su música hasta que me muera o me vuelva sorda!

—Bueno ya, que dramática— dije bajándome de mi camioneta y riéndome de sus peleas tan infantiles.

Las demás se bajaron y nos dirigimos a la cafetería donde se encontraban los chicos.

—¡Al fin! Pensamos que se había arrepentido— dijo a modo de saludo Aarón.

—Como crees que nos arrepentiríamos de salir un fin de semana con tan lindos chicos— dijo con un poco de sarcasmo Sam.

—Bueno, siéntense, ya les habíamos pedido— nos dijo Chris señalando unas malteadas y panqueques.— espero y si les guste lo que escogimos.

Corrí a abrazarlo— Son los mejores, gracias por pedirnos la comida— le dije y le empecé a llenar de besos la cabeza.

— Bueno ya, ya, yo también te quiero— dijo Chris entre risas.

Cada una tomó asiento y empezó a desayunar.

—Chicas, ¿Porque tardaron tanto? — preguntó un chico que estaba sentado junto a Sean. No lo había visto cuando entre.

Alce mi mirada para ver bien su cara—¡Tu!

—¡Yo!— contestó el chico.

—¿Se conocen?— preguntó Axel.

—Pues algo así..— dijo el chico— un día en el trabajo escuche que alguien estaba tocando el piano, entonces me acerqué para ver quien era y ahí la vi, pero cuando ella se dio cuenta de que la estaba escuchando se asustó y salió corriendo— terminó de contar con una risa.

—Si... jeje. Supongo que tú eres Theo, el amigo de Axel y Sean que trabajaba en la tienda, tú debes ser el que le encargo a Sean algo el otro día...

—Sip, ese soy yo, un gusto.

—Un gusto, yo soy Selene, pero dime Sel.

—¿Y por qué huiste cuando te escucho tocar, Sel?— me pregunto Axel.

—Mmm pues... por qué me asuste, si, es que no sabía que había alguien más cerca y pues mi reacción al verlo fue salir corriendo...

—Oye, lo poco que alcance a oír fue increíble, desde cuando tocas el piano.

—Aprendí desde muy chica por qué mi abuelo me enseñó a tocarlo...

—Wow, no sabía que sabías tocar el piano...— dijo Axel.

—Pues si... ¿Y qué tal te ha ido ahora qué regresaste al colegio?— dije intentando cambiar de tema.

Seguimos platicando un rato más, al inicio fue algo incómodo pues a Theo no lo conocía tanto, pero después tomamos más confianza y nos la pasamos muy bien.

Vi la hora— Bueno chicos creo que ya es hora de irnos...

Asintieron todos. Pagamos y nos retiramos del lugar. Cada quien se fue en el coche que venía y arrancamos rumbo a la cabaña de la familia de Ann.

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⏰ Última actualización: Nov 26, 2020 ⏰

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