Entre La Espada Y La Pared

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Pov calle

Me levante como era de costumbre para ir a trabajar, estaba dispuesta a encararme con matu y decirle que no se meta entre poché y yo, la consideraba una  amiga pero con lo que hizo se que va hacer un dolor de cabeza.


Hice todo lo que siempre hacía, le mande mensaje a poché dándole los buenos días, quedamos de vernos en la tarde para salir a comer, poché en pocos días se ha vuelto mi visio de tenerla cerca.


Termine de arreglarme como de costumbre, salí de mi apartamento hasta llegar a la oficina, todos me saludaron como siempre lo hacen por ser hija de la dueña aunque de mi parte siempre he sido buena persona con los demás, no me gusta presumir ni mucho menos ser creída.

-A ti te estaba buscando--señale a matu

-¿Porque hiciste eso anoche? ¿Estas loca? Porque a mi parecer  si-- me cruce de brazos

-Estaba borracha, casi ni me acuerdo calle, no quiero pelear contigo

-Solo vengo a decirte que no te acerques a nosotras, no quiero problemas

-¿La prefieras a ella que a mi?--se señaló así misma

-Si matu, ella no actúa como una niña y sabes te doy las gracias por haberla mojado--levanto las cejas sin entender--gracias a tu estupidez poché y yo estábamos en algo serio--abrió los ojos como plato

-Calle apenas la conoces, ni tan si quieres sabes si es sincera contigo

-Tu no la conoces, pero mejor evitame la molestia de ignorarte, solo déjanos en paz--no deje que dijiera otra palabra, así que camine hacia mí oficina

Me senté en mi silla recargandome, no quería hacer esto pero al saber cómo era ella no iba hacer bueno para nuestra relación que apenas está empezando.








Pov poché

Después de haber salido del apartamento de calle fui hacia mi casa donde trabajo con Laura, en el momento que calle se llevó mi camisa a lavar recibi un mensaje de ella donde me avisaba que la entrega fue hecha perfectamente pero quería mi presencia para platicar de algo o mas bien que alejo hiciera un trabajo.

Era más que obvio que cuando me preguntó quién era no le iba decir que Laura porque iba a sospechar, pero me sentí mal cuando me dijo que no quería mentiras para que esto funcionará y la entiendo yo tampoco quiero mentirle mas pero me da miedo perderla, también que se entere o que hice con su papá podría separarnos y aun estamos iniciando esto.

Quiero ser sincera con ella pero me gana la cobardía de lo que piense, aunque aveces pienso que si lo descubre por ella misma sería aún peor la cosa, en pocas palabras estoy entre la espada y la pared.

Si se lo digo siento que se va alejar, si ella se entera por su cuenta también siento que se va alejar y en ninguna gano, esto es demasiado estresante. Hoy quedé de verla en el almuerzo no le dije que hoy no iría a trabajar porque sabía que se iba preocupar.

Me tome el día junto con Paula para que me ayude a decidir que hacer porque yo sola acabare loca. La invite a mi departamento y faltan como diez minutos para que llegue, lo bueno era que no había ningún pendiente en el trabajo.


Estaba recostada en el sofá dejando fluir mis pensamientos sobre lo que tengo que hacer cuando la puerta sono, me levante y la deje pasar.

-Realmente estas muy mal-- nos sentamos

-No tienes idea de lo estresada que estoy, las palabras de vale y tuya de ayer siguen rondando por mi mente--suspiré recostando mi cabeza en el respaldo

MI FOTÓGRAFA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora