Después de unas semanas casi convirtiéndose en un mes en el que se llevaban bastante bien y de hecho, parecía que ya eran muy unidos. El rubio siempre amable y nunca faltaba estar a lado del pálido en algunos recesos y en la salida. Andrew parecía disfrutar esa compañía pero no la expresaba totalmente.
Ambos ya eran buenos amigos al parecer y para Andrew era la clara muestra de agradecimiento pues no se dejaba escapar con acciones serviciales hacía el rubio pero eran sutiles, tanto que nadie se daba cuenta de que era su muestra de expresar afecto a alguien.
Los dos por igual parecían tener ya un fuerte lazo de confianza e incluso de un cariño que crecía al pasar los días. Para Andrew era una alucinación reconfortante el pensar que probablemente se estuviera enamorando de aquel rubio amable que siempre preguntaba por el, se preocupaba por sus comidas y sus horas de sueño e incluso llegó a enfadarse con problemas que a él le molestaban y eso lo hacía lucir tierno para el pálido y quién sabe, tal vez lo que ocurría era que se estaba enamorando del chico más bajo que el.
Nadie podía saberlo más que el, aunque tenía algunos amigos de confianza le daba pena el comentar esos temas y no sabía totalmente como lograr expresarlo o si de verdad era lo que sentía.
El rubio por otro lado era el que de verdad y confirmaba el estarse enamorando de aquel solitario chico, sus sentimientos crecían más y más al conocerlo a mejor profundidad cada día, como aquel día en el que se había enterado de que le gustaba la fotografía y que le interesaba aprender otros idiomas pero se consideraba pésimo en eso de comprender totalmente las cosas, también el que su sueño más grande era el abrir una cafetería en otro lugar o en otra ciudad para mantenerse felizmente con una casa mediana y alguna que otra mascota.
Detalles tan pequeños como observarlo fotografiar el cielo cuando esté se mostraba tan claro con nubes completamente blancas, la manera en la que el disfrutaba un simple café y la felicidad que sentía cuando le daba al clavo cuando hacía sus propios cafés.
Porque si, ya fueron dos ocasiones en las que el pálido quedaba con el rubio para que se quedarán a dormir juntos en la casa del más alto y era ahí donde el pálido mostraba sus pequeños pero significativas pequeñas acciones que de alguna manera le gustaban al rubio. Los deliciosos panqueques que cenaban esas veces con las tazas de café que especialmente hacía el pálido, el como le expresaba el cariño a las canciones que escuchaba y con el cariño que se expresaba a sus lindos compañeros felinos.
Le era divertido el como fácilmente quedaba dormido cuando estaban hablando en las noches de alguna película que observaban. De los peculiares gustos que esté tenía y de como mantenía la piel de su cara con cuidado debido al peligro del sol por su condición que presentaba, le resultaba de algún modo tierno en como cuidaba a sus gatitos y al momento de quedarse dormido abrazaba una almohada.
Todo eso aunque fuera mínimo, le encantaban al más bajo. No le importaba que el pálido fuera reservado en algunas cosas y de hecho le dolía el hecho de que todavía no pudiera ser más abierto con el pero lo entendía y prefería que las cosas pasarán a su tiempo.
Andrew por su parte le parecía demasiado pronto en cómo confío con el rubio y probablemente ese era un fallo, no quería que el rubio se fuera pues ya le había tomado un gran cariño y debía decir que casi completamente le había otorgado gran parte de su corazón, parecía que el estaba necesitado de la compañía de Víctor pero no quería molestarlo con sus conversaciones largas y tediosas para hacerse sentir mejor, no quería que esté le tuviera algún rechazo por siempre tener algo negativo de que hablar y por eso decidía qué el rubio hablase la mayor parte del tiempo.
Le gustaba que preguntarán por el pero no lo veía muy necesario, los fuertes halagos que recibía del rubio por sus dibujos sencillos que hacía le daban una calidez inmensa pero que el solo reaccionaba en solo un "gracias" y desconectarse de dónde charlaban al no saber que más decirle y se culpaba por eso. Sabía que Victor era del tipo que se fijaba en personas interesantes e inteligentes ¿Por qué se juntaría con el que no ha logrado más que un 6 en matemáticas?
Esas cosas solo hacían que Andrew se mortificarla pero de alguna manera, le gustaba porque sabía que el rubio estaba ahí por cosas sencillas de el, o eso juraría creer por si mismo aunque fuera una gran mentira.
Solo esperaba que ese cariño que le dio de más al rubio no hubiera sido en vano y que al menos durarán unos meses o pidiendo de más, un año juntos de una bonita amistad aunque el deseara que fuera un lindo noviazgo.
Porque si, Andrew había caído enamorado y el no lo creyó hasta que empezó a sentir las mismas cosas que el esperaba que sucedieran como en las cosas de ficción que leía o veía en videos o historias.
Ambos sintiendo un cariño que crecía y crecía al paso de segundos cuando estaban en compañía del uno al otro, ambos querían lo mismo pero igualmente no sabían que hacer o como expresarse, solo esperaban que ninguno de ellos se separaran.
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The lonely boy /// Vicdrew
FanficAndrew solo quería encontrar algo que lo llenará. Algo que dejara de hacerlo sentir invisible para los demás. Algo que hiciera para olvidar lo miserable que se sentía. Y afortunadamente... Lo encontró \\ Victor × Andrew //