f o u r.

485 35 23
                                    

–Entiende morena, no se patinar –Dije por milésima vez, cansada de que Ruth me obligara a patinar–

–Vamos, ¡Sera divertido! –Suplico ella–

–Esta bien –Respondí ya cansada de insistirle– 

En ese mismo momento, llegó Nash con su skate en la mano derecha. 

–Vamos señoritas, hay que patinar –Lanzo su skate al suelo, se poso arriba de el y comenzó a patinar haciendo fuerza con su pierna derecha–

Ruth salio detrás de él, cada vez se alejaban más y yo seguía parada ahí como una árbol. Baje mi mirada para ver los patines, me maldije por dentro por haber aceptado la propuesta. Volví a mirar hacia enfrente y moví mi pie derecho hacia el mismo lado, trate de hacer lo mismo con mi pie izquierdo pero era imposible. Ya estaba en el suelo. 

–Oye, ¿Estas bien? –Oí decir a un chico, por la voz supe que no era Nash–

Levante mi mirada hacia arriba, ¿Por qué coño todos los chicos de esta ciudad están jodidamente buenos? Tenía su cabello de un color castaño oscuro, unos ojos de color marrón claro que para completar eran hermosos, era muy alto, un metro ochenta podría ser. Lo que más me llamo la atención es que tenía gafas y un  gorro de lana color azul, amigo estoy muriendo del calor y tu con un gorro de lana ¿Qué coño? cuando volví a la realidad me di cuenta que lo había dejado clavado con su mano extendida esperando a que correspondiera. Para no ser descortés, correspondí y me levante con su ayuda, no podía hacer equilibrio. 

–Sí, gracias –Corrí un mechón de mi cara, debía estar fatal por la caída– 

–Soy Aaron –Hablo luego de unos segundos de silencio, sentí que me miraba bastante ¡Debo tener algo en la cara! Ay, coña–

–Un gusto, yo soy Lucie –Respondí, di una leve sonrisa a lo que él también lo hizo, estábamos tomados de la mano ya que sino yo podría caer al suelo por mi falta de equilibrio, se sentía raro pero también bonito–

Sentí vibrar mi trasero, no se mal piensen. Mi teléfono estaba en el bolsillo trasero de mi pantalón, solté por un momento a Aaron y agarre mi teléfono e mire la pantalla. Era una llamada de Ruth. 

–Un momento –Hable, él solo asintió con la cabeza y se alejo un poco para que pudiera hablar, apreté el botón verde– ¿Sí? 

–¿En donde estas? Nos tienes preocupados –Chillo Ruth por la llamada telefónica–

–En el mismo lugar desde que comenzaron, en donde caí y me dejaron sola –Hable, cuando dije sola di un tono más alto–

–Vamos por ti –Fue lo ultimo que ella digo, antes de colgar la llamada–

–Oye Aaron –Despegue mi vista de mi teléfono y no lo note, di un la vuelta sobre mi misma y no lo encontré ¿Se ha ido?–

Okay, esto si fue extraño. No patine, practicamente me lance sobre un asiento que había, me acomode y espere a que Nash e Ruth vinieran por mí. Las cosas raras que les pasa a una persona en un día, enrealidad creo que esto solo me pasa a mí, coña. Oí unos gritos, levante mi mirada y note a mis amigos que abandonan cuando no sabes patinar, venian. 

 –Toma mi mano –Hablo Nash, mientras extendia sus manos frente a mí–

No respodí solo tome ambas manos de Nash, el entrelazo su mano con la mía y ayudo a levantarme. Lamentablemente y por suerte, una combinación de ambas, mi rueda se travo en el cesped y tropece. Nash me sostuvo para que no cayera, lo unico fue que quede a centimetros de el rostro de Nash. Ambos hicimos contacto visual, de cerca los ojos de Nash son más perfectos aun. 

–¿Se quedaran así todo el día? –Hablo Ruth–

Actue con rapidez y me aleje un poco de Nash, él también lo hizo. 

–Ahora solo sostente –Volvio a hablar Nash–

(...)

Estaba junto Ruth en el sotano, ambas estabamos en pijama mientras veiamos un maratón de American Next Top Model. Ruth veía contenta el programa, y yo simplemente no dejaba de pensar lo que paso hoy en el parque. No solo lo que paso con Aaron, sino también Nash, ambos. Una pregunta retumbaba en mi cabeza ¿Por qué coño Aaron desaparecio? Seguramente lo espante por lo fea que soy, seguro.

–¿En qué piensas? –Pregunto Ruth apagando la televisión–

–Nada –Respondí mientras mordia mi labio inferior–

–Nash –La miré de costado, podía notar su sonrisa– Es él 

–¿Qué no? –Encendí la televisión, para cambiar de tema–

–Te gusta mi hermano –Murmurro, me limite a lanzarle un almohadon– Oh nena, tu quieres una guerra de almohadas

Ambas tomamos las almohadas que más cerca teniamos e de un salto nos levantamos del sofá. Ella respondio primero, golpeandome en la mejilla con el almohadon. Correspondí sin dudarlo, la golpee en el mismo lugar con mi almohadon rosado.

(...)

–¡Hayes, coño, ven aquí! –Se oyo gritar a Nash desde el piso de arriba, con Ruth nos miramos y escapamos una carcajada–

–¡Que no! –Grito un chico, supuse que era Hayes–

Luego del grito de Hayes, oí como alguien bajaba las escaleras con rapidez. Al segundo aparecio un chico, Hayes seguramente. El unico parecido que tenia con Nash eran los ojos, perfectos ojos. Cabello moreno, como ya mencione unos hermosos ojos azules, y en la altura era practimente igual que yo solo que un poco más alto. Bastante guapo. 

–Tenía razón Nash, eres muy guapa –Hablo él mirandome, inmediatamente me puse como un tomate–

Apenas termino de hablar aparecio Nash, se lo llevo agarrandolo por la oreja. 

Miré a Ruth.

–Eso fue extraño –Hable ya que ella no contestaba–

–Bastante 

_____

¡Hey, chicas! Ayer no pude hacer un capítulo, lloro mares. Y como tampoco pude decirlo, ¡HAPPY BDAY NASHYY! Fue ayer, tiene 17, lloro oceanos. 

Aaron en multimedia. 

Espero poder seguir pronto, ¿Qué les parece si hago un trailer de la novela? 7u7 

¡Comenten sus bellas opiniones de la novela! y no olviden de votar. 

xoxo

Incomprendida ➸ Nash GrierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora