Le mythe d'Eros et Psyché

Amenaza

"Eros representaba el poder sobrecogedor del amor, que por su fuerza puede también destruir."

BaekHyun era el menor y más hermoso de tres hermanos, hijos de NickHun y Tiffany, reyes de Anatolia. BaekHyun, quien a pesar de ser hermoso y adulado por los hombres en su reino, nunca había sido feliz, puesto que todos lo adoraban pero nunca se acercaban a hablarle o inclusive a pedir su mano. Inclusive hasta sus dos hermanas mayores le comenzaron a tener fastidio debido a su belleza. Cada día que pasaba, BaekHyun se sentía más y más solo.

Por su parte TaeYeon, la diosa Afrodita se retorcía de celos en el olimpo, debido a aquel muchacho de tan deslumbrante belleza. Últimamente los humanos estaban dejando de ir a su templo, solo para ir a adorar a ese simple mortal, porque ellos creían que ese chico era la reencarnación de si misma. ¿ Como los humanos pueden ser tan estúpidos?  Se preguntaba cada día que pasaba y perdía más seguidores en su templo. Tenia que hallar una solución a ese problema. Y de la nada una idea en su cabeza se iluminó.

Afrodita hizo un llamado a una de sus tantas sacerdotisas. Pero lo especial de aquella sacerdotisa era que apenas estaba comenzando su trabajo ahí en su templo, aparte era una de las sacerdotisas con las que había tenido relaciones sexuales recientemente. La diosa acostumbraba a mantener relaciones sexuales con sus sacerdotisas, ya que esto era considerado por Afrodita como un método de adoración, a veces mantenían relaciones con la diosa o entre ellas.

- Querida sacerdotisa, requiero de tu ayuda.- Le hablo la diosa a la "principiante".

- Estoy aquí para servirle mi señora.- Respondió la chica sin rechistar.

- Busca a ChanYeol, dile que su madre quiere hablar con él sobre algo importante.- Ordenó la diosa.

- Cómo ordene mi diosa, buscare a Eros y le daré la razón.- Asintió sumisa a la orden y comenzó su camino al monte Helion, donde estaba situado el templo del dios.

ChanYeol estaba un poco aburrido mientras esperaba a que algo emocionante pasará, o a que alguien viniera a hacer alguna súplica por el amor de alguien. Así que justo cuando casi se queda dormido, sintió la presencia de alguien.

- Una sacerdotisa.- Murmuró.

La sacerdotisa se acercó a su estatua en el templo, se arrodilló,  hizo una reverencia y junto sus manos en modo de oración,  comenzó a hablar. ChanYeol sólo la miraba con atención, no era común ver a una sacerdotisa de un templo de otros dios en el de otro, ya que ellas eran muy debotas a sus dioses.

- Eros, dios del amor y la pasión.- Comenzó a hablar la sacerdotisa. - Soy una sacerdotisa del templo de tu madre, la diosa Afrodita, ella me ha enviado para que te informe que necesita hablar contigo sobre algo importante.- Dijo y ChanYeol se apareció frente a ella. - Usted sabe que a su madre no le gusta esperar. - Agregó y ChanYeol la miro con una sonrisa.

- Ya lo sé, ya te puedes retirar, iré a verla.- Dijo y la sacerdotisa asintió, el dios era siempre tan amable. - Ten cuidado de regreso.- Se despido el dios y salio volando en dirección al olimpo.

En esos momentos, NickHun y Tiffany estaban teniendo una conversación algo delicada en cuanto a la situación de su hijo menor, BaekHyun.

- Fanny, cariño, sabes que el ha estado muy triste últimamente, y las chicas no ayudan mucho que digamos.- Suspiro pesadamente el rey.

- Tengo una idea.- Soltó de la nada la reina. - ¿Y si lo llevamos al Oráculo de Apolo?-

- No es una mala idea.- Accedió el rey. - Debemos hacerlo odio verlo triste.- Dijo el rey y su esposa asintió.

- Iré a hablar con el, le diré que se arregle que vamos a salir.- Dijo la reina y salio en dirección al cuarto de su hijo.

Una vez llegó al cuarto de su hijo, suspiro pesadamente, tenia que ser fuerte, y decirle de una vez lo de su visita al oráculo. Tocó la puerta, y esta fue inmediatamente abierta.

- ¿Si?- Hablo el pequeño chico al ver a su madre en la puerta. - Madre, eres tú, pasa.- Dijo y se hizo a un lado para que su mamá entrará.

- Cariño, tu padre y vamos a salir contigo.- Hablo directamente su madre. - Queremos ir a visitar el oráculo de Apología,  y queremos que vengas con nosotros.- Dijo mientras acariciaba la mano de su hijo.

- ¿Y mis hermanas? - Pregunto bajito, a lo que la reina se negó.

- Sólo iremos tu, tu padre y yo.- Dijo y sonrió sonrió a BaekHyun. - Así que arreglate antes de que se haga más tarde.- Dijo y dejo un beso en la mejilla de su hijo. - Salimos en unos minutos, apresurate.- Le comento y se fue, BaekHyun comenzó a mirar que atuendo ponerse.

Según se comentaba, la chica que hacía las consultas al oráculo se llamaba Pitia. Una doncella que veneraba y celebraba a su dios Apolo el día siete de cada mes. Ella era la que realizaba las consultas, se decía que era una virgen, hermosa y intocable excepto por los clientes del oráculo, a los cuales ella les agarraba la mano para poder dar un veredicto.

Por esa razón, BaekHyun se quería vestir bien, pero tampoco llamar tanto la atención, de por si ya lo hacía con su belleza, la cual el consideraba como un castigo de los dioses.

Su madre tocó la puerta y le dijo que ya estaban listos, BaekHyun salió y se despidió de sus hermanas, las cuales simplemente lo ignoraron, el no sabia porque SeulGi y Irene lo odiaban tanto, si el a ellas las quería mucho.

El camino no fue largo, para nada, en un abrir y cerrar de ojos llegaron al Oráculo. BaekHyun no lo va a negar, esta nervioso, muy nervioso, y no mejora cuando le dicen que va a entrar sólo para la lectura individual.

Fue separado de sus padre y llevado dentro del templo, ahí en una tarima, se encontraba Pitia, y vaya que las descripciones no mentían,  todo una virgen hermosa, esta al verlo lo invitó a sentarse frente a ella, por lo cual el obedeció, ella le indicó wue le diera su mano, y su lectura comenzó.

BaekHyun esperaba que su destino no fuera algo malo, quería que por una sola vez, algo le diera esperanza y le subiera los ánimos, pero cuando miro el rostro de la chica, el cual reina una mueca extraña sus esperanzas comenzaron a flaquear, y se vinieron abajo cuando ella hablo.

- Byun BaekHyun, el hijo menor de tres hermanos, el único varón,  al cual se le concedió una belleza cautivadora.- Comenzó Comenzó a hablar la chica. - Tu destino no es el mejor. Te casaras en el cumbre de una montaña con un monstruo de otro mundo.- Sentenció el oráculo y BaekHyun comenzó a llorar en silencio.

🌸🌸🌸

Holisss, volví con otra historia de mitología griega, la cual ya la venía pensando desde hace tiempo, así que espero les guste, tanto como a mi me gusta escribirla para ustedes.

Sin mas que decir.

Me despido.

Calíope.