Cada 1000 años alguien nuevo llega

Capítulo 1

-Mamá cuánto más tendremos que esperar- Termine de decir con un suspiro, llevaba ya más de media hora preguntando lo mismo a mi madre, papá aun no salía del edificio al que entro para pedir unas cosas de la nueva casa.

 -Ya casi, solo espera, ya te repetí más de cincuenta veces que se tiene que hacer un papeleo para que nos puedan dar todos los documentos de la casa- Mi mamá ya me miraba con cara de “porque tuve una hija tan testaruda y preguntona”.

Mi hermano solo mira por la ventana del auto analizando cosas como… yo que sé lo que esté imaginando el estupido de mi hermano, no voy a estar desperdiciando mi vida estudiando su cabeza para saber qué es lo que piensa.

-Oye y ¿a cual escuela iremos?- Termino de decir  Marco, el estúpido de mi hermano.

-No se, es un poco complicado- Con cara triste le respondió mi madre.

-Por que ma?- que no tenía otras cosas que preguntar mi hermano que no sea  sobre la tonta escuela.  

-Mira, tengo una que otra opción, pero no se si tu hermana también vaya a ir al mismo colegio que tú, pero sería la mejor opción- ¡¿Qué?!, no, no quiero pasar toda la prepa  con Marco. - Mamá, en qué piensas, no voy a pasar toda mi prepa con este tonto, ya es suficiente ¿no? kinder, primaria y secundaria estuvimos en el mismo cole- Termine de decir ya un poco enojada, ¿como se le ocurria a mi mamá eso?.

-Apoyo a Esmeralda- Voltee a ver a Marco y le di una mirada amenazadora de advertencia para que no me metiera en sus planes- Okay esta bien solo decia.

-Mira tonto, solo lo dije para mi conveniencia- Me giré y le di la espalda-  no para la tuya- Si seguía así  Marco, iba a terminar con buen golpe en su lindo rostro.

-Heeyyy, tranquilos chicos que no quiero que se peleen en el auto nuevo, pueden salir del auto y lo solucionan afuera, pero no aquí- ¿pero qué? en vez de decirnos que no nos peleemos nos dice que lo podemos hacer afuera, ah pero que buena mamá tenemos.

Finalmente papá llegó, al principio nos miró con cara extraña ya que no sabía que es lo que había ocurrido, pero al final no le tomó importancia, entró en el auto y lo encendió y así comenzó nuestro trayecto.

Todo el viaje a la casa nueva fue tranquilo, solo paramos una vez para cargar un poco de gasolina para el auto.

…………………………………………………………

Al cabo de unos 15 minutos llegamos a la casa. Pero matenme que estoy soñando, en que mundo Esmeranda Hamerthoot iba a vivir en esta casa de ensueños, yo misma me sorprendía al llegar y verla por fuera, se que tenemos dinero, bueno tenemos el necesario y de sobra pero, woow, esto si que es nuevo, en México sólo teníamos un piso ya que vivíamos en un edificio que era como un conjunto de casas, pero esta casa tenía cuatro pisos, estaba adornada por fuera o por lo menos la cubierta era de madera y se notaba que de la más fina. Para poder entrar mi papá presiono unos números en el poste de la reja, después de unos  segundos la puerta se empezó abrir, ¿pero qué estaba pasando?, ¡¿también puerta electrica?!.

El carro comenzó a entrar, estoy tan emocionada, casa nueva, vida nueva, así podré olvidar todo malo que me ha pasado, bueno no comencemos con los malos recuerdos, hay que vivir el momentos y éste es mi momento. Mi papá se detuvo frente a la casa, se giró un poco y nos volteo a ver.

-¿Están listos familia?- “Ya dejanos salir del auto papá” pensé ya un poco emocionada y desesperada, ya quería poner un pie en la nueva casa.

-¡Ya!- Grité tan alto que hice que mi hermano se tapara los oídos al instante, jajajaja pobre Marco, yo misma me pregunto cómo es que me soporta.

-Okay, okay pueden bajar del auto- Si, al fin, gracias papá.

“Okay, tranquila Esmerada, tranquila, no quiero que incendies la casa con tus tonterias, solo respira ¿si? tranquila, respira, respira” me decía una y otra vez en mi cabeza mientras iba entrando por primera vez en la casa. No, saben que, me da igual, a correr.

Comencé a correr por toda la casa como una pequeña loca, jajaja si mis amigas me vieran pensarian que estoy así de contenta porque un chico guapo me pidió que fuera su novia, pero pues aqui no tengo amigas asi que. En eso por un descuido mio estire mis brazos mientras corría y entonces tire un jarro muy lindo de color café, en lo que me detuve para analizar “la escena del crimen” vi como mamá iba entrando en la parte de la casa en donde me encontraba junto al jarro que se encontraba hecho pedacitos en el suelo, cuando miro al suelo y se dio cuenta del jarro se le formo una pequeña “o” en su boca y enseguida la cerró.

Poco a poco fue levantando la cara, llevo viviendo con ella más de quince años y no es para dudar que estaba furiosa. Cuando vi que venia hacia mi le di la espalda y comencé a correr como lo estaba haciendo hace unos minutos, no se a dónde, pero entonces vi las escaleras y corrí a la segunda planta, cuando entre a un cuarto y cerré la puerta con seguro, nada más escuche por fuera.

-!ESMERALDA¡- Dijo mi mamá ya muy furiosa.

Dios si que se enojo, solo que aqui adentro del cuarto no me puede hacer nada, tome un poco de aire ya que me percate que estaba conteniendo la respiración, y en un suspiro me puse a reir como loca por la persecución que acaba de pasar hace unos segundos.

“Como se pone mi ma solo por un jarro, solo es un simple e insignificante jarro, ni que se fuera a acabar el mundo por romperlo”,ya me podría imaginar su cara de tomate que tendrá en estos momentos. Y apuesto que enseguida se puso a buscar a papá y cuando lo encuentre le dirá, “Oye Tomas, dile a tu hija que se calme ¿no?, de por sí ya tenemos suficiente con Marco”, entonces alguien detras mio dijo.

-Creo que estás en problemas hermanita- Aprete mi cara y me gire y encontré a Marco, hajj solo me faltaba esto, que no tenía otra estupidez qué hacer, no sé, ponerse a jugar con “lilly”, asi le dice al xbox.  

En serio que no me di cuenta que entre al cuarto de Marco, ¿pero cómo escogió el este cuarto?, salí y vi el la puerta un letrero que decía el nombre de mi hermano en letras de color azul, tan estupida soy que no me di cuenta que este era su cuarto, sí que estaba ciega ya que las letras eran del tamaño de un dinosaurios. “Estupida, estupida, estupida”, me repetía una y otra vez en mi cabeza.

Bueno solo me quedaba una misión en este planeta y era averiguar dónde estaba mi habitación.

-A la baticueva- Grite como una niña pequeña, la verdad no lo podía negar a veces soy muy infantil- Turururun- iba cantando mientras buscaba mi cuarto.