Por su mente nunca paso convertirse en ese tipo de persona.
"Sátiro"
Tampoco imagino que esa palabra lo describiría a la perfección.
Todo había comenzado con platicas explícitas.
La curiosidad era normal en alguien de su edad.
"Curiosidad"
Una conducta natural en el ser humano, el deseo más autodestructivo que puede existir.
Tenía una conducta sexual altamente hiperactiva.
Ya no podía evitarlo, su mente lo llevaba a divagar en un mar de mera fantasía.
Era su problema, también quizás el más grande secreto que poseía, nadie más lo sabía y no planeaba contárlo, ni siquiera a su más grande confidente.
Ahora que lo pensaba todo el problema era en gran parte su culpa, aveces deseaba no haber entrado el pecaminoso camino de la lujuria, pero de inmediato rechazaba el pensamiento.
Aún se consideraba virgen, ya que nunca se había relacionado con algo más que no fuese su mano, aunque las ganas no le faltaban.
Recuerda a la perfección la primera vez que se había tocada.
Tenía catorce años, era de madrugada y hacía calor en extremo; de un momento a otro, recordó la plática candente que sostuvo con Sasuke por la tarde, este se encargaba de recordarle cada que podía lo bueno que era la autosatisfacción.
Otra vez la misma palabra se repetía, "curiosidad".
Por un momento se pregunto si aquella sensación era tan buena como su mejor amigo describía.
Su mano descendió lentamente, acariciando por sobre la tela del short la zona de su hombría, dudando de hacerlo.
Tanteo por un unos cuantos minutos la zona, hasta que sintió la dureza en su falo, armado de valor adentro su mano para tener contacto directo con su dermis.
Debido a la incomodidad optó por bajar la prenda hasta la rodillas y sentarse enmedio de la cama.
El movimiento de su mano lo hizo soltar un alarido que lo tomo por sorpresa, de manera inmediata se ocupó de callarlo con su mano izquierda, no quería despertar a sus padres que estaban en la habitación contigua.
Su mano bajo de manera lenta hasta la base y subió nuevamente con la misma lentitud, trataba de analizar la sensación, corrientes eléctricas subiendo por toda su anatomía para después caer y concentrarse en un punto específico.
Sintió la humedad gotear desde la punta, tomándola para extenderla por la longitud.
El abrumador sentir lo hacía soltar leves jadeos que se sincronizaron con el movimiento de su mano que poco a poco se volvio constante y rápido.
Un fuerte gemido escapó al concentrarse en la punta, su cuerpo se retorcía cuál gusano con sal, mordía su mano izquierda en un intento de controlar los sonidos que producía.
Sus caderas se movían en busca de más, haciendo el movimiento más rápido y húmedo, causando un ruido acuoso, su cuerpo se doblaba de manera involuntaria, sintiendose temblar por la exitacion, sufrió su primer orgasmo que venía acompañado de la sustancia blanca y un gemido incontenible, las últimas sacudidas en su miembro lo dejaron totalmente agotado en el éxtasis.
Babeo en su mano ante los íntimos vestigios de placer, su cuerpo sudoroso se pegaba con las sábanas, jadeaba en busca de aire.
No podía mover su cuerpo debido al cansancio, tenía sueño, mucho sueño, pero tenía que limpiar la sustancia pegajosa en su vientre, espero un poco intentando no caer dormido.
Había sido la mejor experiencia de su vida, ¿Porque no lo había echo antes?
Cuando estuvo limpio, cayó dormido como si nunca lo hubiese echó.
Al día siguiente, sábado, se encontraba inquieto, queriendo repetir la bruma del placer, excusándose de malestar, se encerró todo el día en su cuarto para masturbarse.
De eso hace dos años, en el transcurso de esos dos años recordaba haber tomado una rutina después de la escuela, que consistía en evitarlos y encerrarse en su habitación.
Su padre era abogado, por lo tanto la mayor parte del tiempo se la pasaba en su despacho atendiendo clientes y aveces llegaba algo tarde a casa.
Era fácil evitarlo.
En cambio, su madre era otra cosa, era ilustradora en una editorial, por lo tanto trabajaba desde casa.
Era difícil complacerse con ella en casa.
Su casa era grande, pero de un solo piso, así que se encerraba diciendo que tomaría una ducha, cuando en realidad pasaba la mayor parte del tiempo tocándose bajo el chorro de agua.
Ahora su hiperactividad se había vuelto un problema, antes podía controlar sus pensamientos lujurioso, ahora no tenía ningún tipo de control sobre ellos.
Se había sorprendido así mismos variada veces al encontrarse con una erección enmedio de las clases, una situación sumamente vergonzosa si le preguntaban, inclusive llegó hacerlo en los baños de la escuela al no poder bajar su situación.
Hablar de temas consensuales con sus amigos se había echo mucho más natural y liberal, antes también hablaban de eso y no prestaba demasiada atención, ahora podía aportar a la conversación.
No solo eso.
Ahora buscaba algo más, perder su virginidad, tal vez.Quería experimentar más placer del que se brindaba.
Ahora conocía páginas que se supone no debería conocer.
Ahora gozaba de su sexualidad.
Ahora tenía problemas para controlar su libido.
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Bueno pues que les digo, soy perversa :v
Está historia será narrada en... ¿? No sé ni lo que hago :v bueno también serán con actualizaciones "esporádicas" osea cuando me llegue la inspiración.
Si les gustó dejen su estrellita y síganme (si se puede :v)
Bye UwU
