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ocho

Alguien llamó a la puerta del despacho de Kim con sus nudillos. Tras el "adelante" del dueño, abrió la puerta y se asomó a la sala.

Era Jimin, tenía los ojos cerrados y solamente abrió uno con miedo, para echarle un vistazo al lugar antes de decidirse a entrar.

— No estoy acompañado. -aclaró Seokjin.

El hombre estaba sentado detrás de su escritorio, como siempre, mirando la pantalla de su ordenador detenidamente. Cuando el otro se plantó frente a él, apartó la mirada de su ordenador para atenderle.

— Menos mal, no quería volver a veros tener... lo que sea que fuera eso...

— Park Jimin -rechistó Kim-, no quiero que se tome estas confianzas simple y llanamente porque sea amigo de mi... de Kim Taehyung. ¿De acuerdo?

Las mejillas de Jimin se enrojecieron e hizo una pequeña reverencia como disculpa, acompañada por un "Lo siento, señor Kim".

— ¿Para qué ha venido, por cierto?

— Ah, solamente le traigo estos papeles en nombre de Taehyung.

Seokjin miró cómo el menor dejaba un par de folios en la mesa. Por cada segundo que pasaba la cólera llenaba su cuerpo con más rápidez. Pero en vez de expresarla con un grito que pudiera dejar las paredes hechas escombros, se tapó la boca con una mano y comenzó a reírse, frustrado.

— Mira, Park, ya sé que te acabo de decir que no tengas tantas confianzas conmigo -comentó Seokjin-, pero te voy a ser sincero, y quiero que le hagas saber esto a tu amigo: si no tiene valor para presentarse en mi oficina y decirme a la cara que no sabe nada sobre Jeon, que no se atreva a presentarse a media noche para-

El carraspeo de una voz femenina interrumpió su conversación.

— Perdone -dijo la mujer, con un hilo de voz-, su reunión con la nueva empresa de equipamiento va a empezar en doce minutos. Le estaremos esperando en la sala B.

— Llegaré allí en cinco minutos.

Kim le dedicó una mirada asesina a Jimin para que abandonase la sala, y así lo hizo, intentando mantener un ritmo respiratorio normal.

( . . . )

— ...entonces me fui de su oficina y he venido directamente a contártelo.

— Joder...

— Sí, te va a joder bien jodido.

Taehyung miró el tenedor de plástico con el que había pinchado su ensalada, el cual pretendía llevarse a la boca antes de que su amigo apareciera por la puerta, alterado. Tras unos segundos decidió no dar ese bocado y soltar el tenedor de plástico dentro del recipiente a juego. Jimin observaba todos sus movimientos, esperando algunas palabras más.

— ¿No te valía ya con el antecesor de Kim? Al menos él te llevaba a comer a algún sitio que no fuera tu escrito de la oficina... -destacó Jimin.

El moreno soltó un suspiro, le había resultado gracioso lo que había dicho.

— Este Kim... este nuevo y jóven Kim... ¿cómo decirlo...? -Taehyung se llevó una mano a la barbilla- Podría escupirme en la boca y le daría las gracias.

— Estupendo, gracias por la información -contestó sarcásticamente-. Si me disculpas, me retiro, odio cuando te pones horny.

— ¡No estoy "horny"! -exclamó Taehyung, haciendo comillas con los dedos al decir esa expresión.

Jimin rodó sus ojos e hizo un gesto de burla con sus manos.

— ¡Vale, vale, no es sólo eso! ¿Sabes cómo es conmigo?