En el pueblo se murmuraba sobre una hermosa doncella que habitaba la casa del carpintero, pero ese murmullo pronto se convirtió en mito ya que nunca se la vio. Cerca de la casa del carpintero, bueno, alado de la casa del carpintero vivía un joven con su madre, el era un chico educado y gentil, no está de más decir que era uno de los galanes del pueblo, caracterizado por su voz, veras, el entonaba hermosas canciones, día y noche. Lo que no sabía era que una chica, secretamente, lo escuchaba cantar desde su cuarto ya que casualmente estaban pegados, y al abrir la ventana se escuchaba la melodía del joven como si él estuviera ahí cantando solo para ella. La chica soñaba con el todos los días, con conocer al dueño de esa voz, con escucharlo de frente para que le cante a ella y solo a ella, pero, conociendo el peligro que el amor causaba, se limito con escucharlo por la ventana, aunque lentamente se enamoraba cada vez más, y el no poder conocerlo la hacía sufrir, lo que hizo que la rosa lentamente se tiñera de negro.
Un día muy especial, la dama sin corazón estaba sentada en su ventana escuchando a su amor cantar, y no pudo resistir, ella conocía la letra, ya que el la venia repitiendo por un par de días, ella sabia la melodía perfectamente, entonces la canto, y dejo que su voz se escuche tan fuerte como la de él, que no se dio cuenta cuando la de él paro de sonar y solo la de ella se dejaba escuchar. En ese instante, la chica paro, su padre entro a su habitación y le cerró la ventana, lo último que escucho fue su voz gritando un, quien eres?, el padre de la chica furioso y asustado la arrastro al sótano, donde el mínimo contacto con el mundo no existía, allí la chica de a poco se fue marchitando, sus labios perdían su rojizo color y su largo cabello se iba acortando, nunca volvió a escuchar la voz del chico.
Una noche, mientras el padre dormía, ella escapo, salió a la calle y corrió a la casa de alado, toco la puerta sin fuerzas y abrió una señora con amabilidad en sus ojos y preocupación en su cara, la dejo pasar pensando que estaba perdida, lo que no sabían era que en ese preciso momento ella estaba muriendo y ya no le quedaba mucho tiempo, cayó al piso y vio como un chico bajaba por las escaleras y corría a ella.
La sostuvo en sus brazos, y lo supo, era la chica, era la misteriosa voz que entono su canción tan maravillosamente, acerco su oreja a los labios de ella esperando escuchar aunque sea una nota, y con lagrimas en sus ojos escucho como le canto en susurros su canción, y el inocentemente solo queriendo escuchar la voz de ella, no la siguió, lo que ella necesitaba era escuchar la voz de él. Pero la rosa termino de morir, y ella, se marchito.
Pasaron los años y todavía se dice que un hombre canta junto a la tumba de una doncella de la que nadie sabía de su existencia, esperando escuchar como ella sigue su canción. Aunque con el tiempo el chico murió, se le enterró alado y entre sus tumbas creció una simple rosa, tan roja como los labios de la dama y tan hermosa como la voz del joven.
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Cuentos Cortos 1
RomanceSiempre me gustaron los cuantos cortos de historias muy fuertes, así que acá voy a publicar varios escritos por mi, espero que les gusten, por ahora van a ser dos cuentos y luego agregaré más dependiendo si le gusta a alguien y seguramente haga una...