Desencuentro (1)

2 0 0
                                    

Déjame contarte una historia, la de una chica sin corazón, literalmente, perdió su órgano vital en el momento en el que nació, junto con su madre, y lo reemplazo por una rosa, tan roja como la sangre y del tamaño de un puño cerrado.

Esta rosa crecía lento, tan lento que en el momento que florezca totalmente ella ya estaría muerta, el único problema era que no debía enamorarse de la persona incorrecta, pues si sufría por amor la rosa se marchitaría y moriría, el miedo de caer por la persona equivocada inundo a su padre, quien la encerró y no dejo que ningún hombre del pueblo la vea. Ella, como la rosa, era hermosa, no había chica que se compare con su largo pelo y rojos labios. El padre sabiendo que cualquiera se enamoraría de su belleza solo dejo que la vean las damas que trabajaban en la casa, y la chica constantemente les pedía que le cuenten como era el mundo exterior, pues solo lo veía por la ventana de su cuarto.

Cuentos Cortos 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora