\Uno/

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Hacía dos años que Jimin y JungKook habían sido padres de dos mellizos; una niña y un niño. Desde ese momento, JungKook se distanció de Jimin. Apenas lo tocaba o tenían sexo y si lo tenían ers rápido y frío. El rubio estaba desesperado, amaba a su esposo. Siempre lo amó y lo amaría. Pero él necesitaba pasión en la cama. Por eso tenía amantes, que le hacían satisfacer ese parte que su esposo ya no lo deba. Ellos llevaban diez años casados y antes de tomar la decisión de ser padres, Jeon era muy apasionado en la cama. Pero una vez que esos bebés que Jimin llegó a detestar llegaron. Todo cambió.

Jimin llegó a su casa, después de viajar a París, para hacer de modelo en la pasarela parisina. Fue hasta su habitación y se encontró a JungKook en medio, con varias almohadas a los lados y los mellizos abrazados a su padre. Si, eran solo hijos de JungKook, el había puesto su semilla. Jimin odiaba esa idea, pero JungKook se lo suplicó. Al rubio no le gustaban los niños, los detestaba. Pero tenía que aguantar a esos niños idénticos a su padre.

—¿Dónde cojones duermo yo? —Jimin despertó a JungKook, con cuidado de no despertar a los niños.

—Oh, ha llegaste. —El castaño ni se movió.

—¿Dónde duermo? —JungKook miró a Jimin.

—Lo siento Jimin, los niños están teniendo problemas en dormir, así que te he dispuesto una habitación arriba.—El más bajo no se lo podía creer.

Esto era lo último que faltaba.

—¿Mis cosas? —JungKook rodó los ojos.

—En la habitación de arriba, será solo una temporada. Hasta que los niños entiendan.

El mas bajo negó con la cabeza y se fue hasta la habitación de arriba. El matrimonio vivía en una gran mansión de tres plantas. Ya que JungKook era juez y dueño de uno de los mejores bufetes de abogados. Por otro lado Jimin era modelo y dueño de la revista más vendida de Corea.

[×]

Cuando Jimin bajó al comedor, el desayuno estaba listo, pero estaba sólo.

—Buenos dias señor Park. —Aunque él y JungKook estuvieran casados, cada uno seguía con su apellido de soltero.

—¿Dónde está mi esposo? —La mujer le sirvió el café.

—Se fue temprano, me dio el recado que te dijera que llegaría tarde hoy. —Jimin se encogió de hombros.

—¿Y los niños?

—El señor se los llevó a su madre. —Jimin se terminó el café.

—Grácias. —Se levantó y se fue a la ducha.

Debajo del agua, se puso bastante aceite en los dedos y comenzó a masturbarse. Se introdujo varios dígitos en su entrada y con la otra mano masturbó su erección. En Paris estuvo con un modelo francés, muy bueno en la cama. Le hizo ver las estrellas, así que pensó en él. Hasta que llegó al clímax y eyaculo en su mano. Luego apoyó su frente en el mármol de la ducha.

Cuándo llegó a la oficina, se dejó caer en la silla. Hoy tenía una sesión a las cuatro. Siempre tenia sesiones de fotos, le gustaba ser parte de la revista. Estuvo toda la mañana revisando todo que estubiera bien. Luego se acordó que había un nuevo fotógrafo y no lo había saludado. A él le gustaba ser amable con todos sus empleados. Con más de uno se había acostado. Pero todos sabían que era eso, solo sexo. Podria durar un día, una semana o un mes. Pero de ahí no pasaba. Jimin no quería que confundieran las cosas.

Llegó al set de fotografía, y vio a un chico con el pelo negro fotografiando a dos modelos en lencería. Jimin lo observó y no pudo evitar sentirse atraído.

«Serás mío». Pensó.

Se acercó y cuando el hombre dejó de fotografiar vio a Jimin. Casi se le cae la camara, si había ido a trabajar a ese lugar odiando fotografiar modelos, era porque siempre estuvo enamorado del chico. Habían ido juntos a la universidad, pero Jimin nunca se fijó en él.

—Hola, soy Park Jimin. —Se mordió el labio inferior, haciendo que Yoongi tragara saliva.

Jimin miró las manos del chico, que tenían la camara. Esas manos eran grandes, se las imaginó agarrando sus nalgas.

—Yo-yo soy Min Yoongi. —Se pudo notar que estaba nervioso y eso a Jimin le gustó.

—En una hora me vas a fotografiar, será desnudo. —Yoongi al atragantarse con su propia saliva, comenzó a toser.

Eso le hizo gracia a Jimin. Así que tuvo una gran idea. Les dio a todo el personal del set lo que quedaba del dia libre. Así dejandolo solos a él y a Yoongi. El rubio en su camerino, cogió lubricante y comenzó a lubricar su entrada. Luego se puso una bata de seda y entró en el set. Se quitó la bata de espaldas a Yoongi y la dejó caer a un lado. Min notaba como su erección iba creciendo. Así era Jimin, tomaba siempre lo que quería. El modelo, se tapó con una sabana blanca su hombría y puso una pose sexy. Para el fotógrafo esto era como tocar el cielo, pero su erección estaba a la vista de Jimin y una vez que le hizo un par de fotos y fue a su mesa, para sentarse y mirar como habían salido las fotos en el ordenador. Jimin se acercó a él, completamente desnudo.

—Quiero ver como he salido. —Se sentó encima de los muslos de Yoongi, así notando la gran erección—. Salgo bien. —Comenzó a frotarse.

—Señor Park. —Soltó Yoongi casi en un gemido.

Jimin se giro y miró los ojos brillosos del contrario.

—Quiero que me folles y se que tu quieres follarme. —El fotografo creía que estaba en un sueño. Hacía años que se había estado masturbando pensando en Jimin.

—Pero está casado. —Jimin se puso de rodillas y sonrió.

—Y lo seguiré estando, es mi marido y lo amo. Pero quiero que me folles. —Sacó la gran erección de Yoongi y se la metió en la boca, chupó y lamió toda la extensión—. Por lo que veo tú también quieres.

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No me odien, tenía que hacer este fic.

𝒫ℯ𝓇𝒹𝒾𝒸𝒾ℴ𝓃 🔞 (Kookmin/Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora