06

928 132 48
                                    

Daniel;

Llegué al psicólogo como siempre, salude a More, hablamos un rato y, finalmente, entre al consultorio con Valentin.

—Dani, hoy tenemos que hablar de algo serio — me dijo sentándose enfrente mio. Lo mire confundido y él habló —. Mira, vos sabes lo de nosotros... 

Asentí algo preocupado y el siguió 

—Si en algún momento vos te sentís incomodo o no podes contarme tus cosas, vas a tener que buscar otro psicólogo.

Lo miré sorprendido y él procedió a explicarme.

—Si vos seguís viniendo conmigo, pero no me contas nada o me mentís, yo no te voy a poder ayudar — dijo acariciando mi mano por encima de la mesa —. Así que si sentís que ya no me podes contar tus cosas, me decís y no va a haber ningún problema, ¿Si?.

Asentí y disfruté del suave tacto de su mano.

—Bueno, contame, ¿Como estás? — me preguntó entrelazando nuestros dedos.

—Bien, mamá últimamente se está sintiendo mucho mejor y mi hermana ya pasa mas tiempo en casa. Mi papá sigue trabajando un montón pero por lo menos le dieron un aumento. 

—¿Y las batallas?, ¿Como vas?

—Bastante bien, voy mejorando. Ayer gané la semifinal en una competencia y hoy mas tarde está la final.

—Vas a ganar — me animó dejando un apretón en mi mano.

Le sonreí y bajé la cabeza sonrojado.

Sentí que dejó de agarrar mi mano, así que lo mire. Separo su silla del escritorio y palmeo sus piernas. Supuse que quería que me siente en ellas, así que me paré y lo hice, haciendo que sus brazos rodeen mi espalda y me peguen a su pecho.

Busqué sus labios con los mios y dejé un beso en ellos, me correspondió. Cuando nos separamos empezó a acariciar mi espalda, por la relajación decidí apoyar mi cabeza en su hombro.

—Sos mimoso — murmuró en mi oído.

Sonreí y asentí abrazándome a su cuerpo. Él soltó una risita y siguió acariciando mi cuerpo. 

Levantó mi cabeza de su hombro y rozó nuestras narices, sacándome una sonrisa.

—Tenes una linda sonrisita — afirmó acariciando mis cachetes.

Dejó un beso en mis labios, haciendo que sienta un cosquilleo en ellos. Me sentía tan bien con Valentin.

Esto de noviar un rato antes o después de las sesiones me encantaba.

—¿Queres que sigamos así? — me preguntó —, sabes a que me refiero.

—Si... creo que lo mejor es que sigamos así.

Asintió y volvió a hacer caricias en mi espalda.

—Acostate amor — murmuró acomodando mi cabeza en su hombro.

Sentí como se sacó los lentes que traía y los dejaba en el escritorio.

Sus manos se dirigieron a mi cintura y se quedaron ahí, dejando caricias suaves.

¿Como pude vivir tanto tiempo sin él?

Por desgracia, llegó la hora de irme. Habíamos escuchado la bocina del auto de mi papá y los golpeteos de More en la puerta.

Nos levantamos los dos y Valentin le avisó a Morena que yo ya iba, después volvió conmigo.

—Te va a ir bien — me aseguró dejando un beso en mi frente —, vas a ganar.

Dejó un ultimo beso en mis labios y yo me fui.

¿Estaba mal enamorarse de mi psicólogo?, Porqué yo lo estaba haciendo.

Me puse las pilas, ¿Vieron?

Tuve que terminar este capítulo desde la tablet porqué ripeo mi compu.

<3

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 02, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Psicólogo ; WosaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora