Prólogo II

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Un día más transcurría en el bello pueblo de Karmaland, los rayos del sol lentamente iban iluminando aquel lugar, el viento movía el césped y también las hojas de los árboles. Tan pronto como la naturaleza despertaba, la actividad entre los habitantes del pueblo lo hacia de igual manera.

-Vale, se ve bien- Dijo Rubius, uno de los habitantes de Karmaland, quien se encontraba construyendo una pequeña casa debajo de la isla de Vegetta, siendo el nuevo "parásito" del antes mencionado. Esto se debia a que noches anteriores, el de pelo descolorido habia perdido una apuesta con Auron.

-Flashback-

Auron y Rubius se encontraban en el bar del pueblo, bebiendo como si no hubiese un mañana

-Auron, hagamos una apuesta!- La voz de Rubén se hallaba perjudicada un tanto por los efectos del alcohol

-Ahora con que vas a salir tu?- Respondió su contrario, también ya un tanto perdido en el alcohol al igual que su compañero

-Quien se mantenga toda la... noche en pie gana. Si yo gano, irás a explotarle la casa a Luzu y le declararás tu amor-

El castaño rió un poco -Pero que c0jones estás diciendo!, Yo no siento nada hacia Luzu...Solo somos amigos y ya!-

-Hombre, por favor, es muy obvio lo que sientes por él- Rubius se acercó a Auron, juzgandolo con la mirada -Todos te hemos visto muy cerca de él desde que llegaste al pueblo-

El de ojos marrones no pudo evitar apartar la vista, Rubius tenía razón. 

-V-vale, pero si yo gano tendrás que pedirle a Vegetta que se case contigo y tendrás que irte a vivir con él, trato?-

-Vale, pero tu también tendrás que proponerle matrimonio a Luzu entonces!...-

Auron bufó un poco ante la iniciativa
-Vale, vale....eso nunca pasará. Mesero!, traiga otras tres rondas más!

Ambos hombres pasaron el resto de la noche bebiendo y hablando, mientras que Auron aún podia mantenerse en pie sin esfuerzo alguno, Rubius estaba a punto de colapsar... estaba muy mareado y tenía una migraña horrible.

-Venga, vas a dejarte vencer tan facil?- Dijo Auron sosteniendo un tarro de cerveza para después darle un buen sorbo

Rubius simplemente estaba recargado en la barra, quejándose del horrible dolor de cabeza que tenia. Tenía unas inmensas ganas de vomitar, sin embargo sabia que no lograría llegar a ninguna parte. Esto se debía a que ya tenía tiempo sin beber demasiado. Ahora solamente el orgullo era lo que le mantenía de pie. No quería que la buena relación de amistad que él tenía con Vegetta terminase por una simple apuesta.

Simplemente soltó una ligera risa y dio un sorbo más a aquella bebida que tanto mal le hacia

-Pfff... que dices? *hip* -

-Vamos hombre... te estoy haciendo un favor al hacer que le pidas matrimonio a Vegetta... todos sabemos que se traen ustedes dos

-Pero que dices?!, No hay nada entre triple Duque y yo-

-Bueno, creo que él único que no lo sabe eres tú...

-A que te refieres?... Él te ha dicho algo?

Auron sonrió levemente y simplemente ignoró a su acompañante, tomando otro poco de cerveza. Esto provocó pena en el chico ojiverde. Él sabia que el castaño tenía razón, sin embargo, no quería admitirlo... al menos no abiertamente.

Rubius estaba enamorado desde hace tiempo de aquel sujeto de ojos morados, en el fondo, el anhelaba esa unión para tener un motivo por el cual verle todos los días. Pero había un problema... ambos tenían esposa y sin duda Vegetta amaba a Akira, pero Rubius ya había perdido el interés por Nieves (y la chica ya había perdido el interés por su "esposo" de igual manera).
Había pensado en repetidas ocasiones como decírselo, sin embargo, siempre surgía algo que lo impidiera...

-Bueno...pero tampoco lo dije para que te molestaras, oh... espera, si lo hice...- Dijo Auron un tanto burlón, haciendo que Rubius regresara a la realidad de las cosas

Sorprendentemente se sentía un tanto mejor, el dolor de cabeza se había ido pero la necesidad de vomitar seguía constante e iba en aumento cada segundo que pasaba. Al no poder aguantar más Rubius corrió hacia el baño del lugar para luego hincarse ante el retrete y vomitar dentro de éste, después de unos minutos sintió un gran alivio... se puso de pie y al salir pudo ver a Auron recargado en una pared fuera del baño.

-Pues...ve pensando en tus votos matrimoniales- Dijo el castaño con una gran sonrisa en su rostro

-Pero de que hablas?, esto todavia no termina-

-Yo he visto que te has hincado y claramente dije que el último en pie gana...-

-P-pero cabrón!!!!- Rubius intentó darle una buena bofetada a Auron, éste último retrocedió un par de pasos, haciendo que el atacante cayera al piso

-Bueno...así te queda más claro?-

Finalmente Rubius decidió rendirse, ya no podía defenderse ante la inminente victoria de Auron.

-Venga, vamos a casa que ya no aguanto este lugar...-

Rubius logró levantarse del suelo con ayuda de Auron, ambos caminaban a sus respectivas casas.

Al llegar a casa, Rubius intentó hacer el menor ruido posible al dirigirse a su habitación, pero hacia más ruido que un elefante en una tienda de espejos, logrando despertar a Nieves.

-Bueno, a ti que te pasa?, estaba durmiendo, cerdo!-

-Calla... que no estabas con Akira?-

-Te dije que regresaba a las 10...-

-y?...-

-SON LAS 5 DE LA MAÑANA-

-Ah....-

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Buenas las tenga uwu
Pues na' , no me quedé conforme con el primer prólogo he hice otro, simplemente cambié un poco mis ideas (por eso he tardado en escribir de vuelta), no prometo nada pero intentaré ser más constante jsjs

Vi que les encanto el primer prólogo y realmente me alegra que les haya gustado y espero también que toda la historia les sea de su agrado

//También he tardado porque hace mucho que no me leía un buen yaoi y pues la inspiración desapareció de poquito en poquito jajsja//

Sin más que decir... hasta la pocima uwu

-LaFujoshiFanUwU

Un sueño en Karmaland (Rubegetta)Where stories live. Discover now