Jueves 25 de diciembre de 2003
En un pequeño viñedo de Tepetongo, a la media noche una campesina llamada Nora tuvo a su hija en este lugar , después de ese momento lloro al escuchar que su pequeña bebé estaba sin respirar y se estaba poniendo morada. Nora muy preocupada lloraba y todos los presentes le decían:
-Háblale a la niña, dile que respire ella conoce tu voz-.
Nora empezó a decir de manera tierna:
-Pequeña Jenni por favor respira, respira-.
La bebé comenzó a respirar a la vez que se calmó y se la dieron a Nora en sus brazos.
Un año después la niña comenzaba a caminar y se hizo una gran amante de las uvas, que antes de que las uvas las hicieran vino ella se robaba una, en ocasiones dos y muy seguido el racimo completo.
En este viñedo la niña vivía muy feliz a lado de los seres que amaba.
Su madre la señora Nora y su padre es señor Gabriel.
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La chica de las uvas
Short StoryUna Chica conectada con una fruta desde su nacimiento