Chetlop un gato a través del universo

No tengo alternativa.

Desaparición forzada.

La desaparición  de Paiper seguía sumadon minutos, luego se convirtió en horas, para  después pasar un día  entero sin saber  nada de él. La angustia  acobijó a todos los seres  cercado de Paiper. Debido a que la desaparición  hizo parte   del momento preciso del tiroteo. La policía añadió el caso y se ordenó la  búsqueda  de Paiper. La escena  del lugar preciso donde Peiper había  estado por última vez,  es ahora  escenario de búsqueda   de varios detectives y policias. Las horas concurrían sin dar esperanzas. Les estaba costando  en encontrar alguna pista que  les ayudara a sumar al caso.  la falta de evidencia  complicaba el   poder dar con el paradero de Paiper. Mientras la familia de Paiper habla con la policía y brindaba toda la  información posible. Chet  se encontraba con la detective  karla dándole toda la informa  que tuviera, para sumar al caso, y ver si se logra aclarar las intensiones y  razones  por las que pudieron haber llevado a la desaparición. 

- ok, joven chet..podría describirme detalladamente lo  sucedido,   por favor. Pedía la detective  karla mientras se acomodaba en el sillón y tomaba su libreta de apuntes.
- Claro. Todo sucedió muy rápido. Peiper y  yo nos encontramos en la alberca de natación del colegio. La entrenadora nos había indicados nuestras tareas. Yo por razones personales  no fui indicado a hacer limpieza dentro del agua. Así que me ubico en los pisos de afuera, y a Peiper siendo el único  que sí lograba entrar sin problemas a la alberca, le indicaron limpiarla. Ambos acatamos las ordenes, y nos dispusimos a cumplir  nuestras tareas. Al momento de limpiar por debajo de la banca, la manguera flotante se había atorado, esto me tomó mucho esfuerzo, no lograba safarle por más que lo intentara  la manguera seguía  atorada. Así que le pedí  ayuda a Paiper, él aceptó, pero primero tendría que esperar  que terminara de fregar las baldosas. En un momento sentí el salpicar del agua, volteé en busca de Paiper, me acerque, y asome mi cabeza buscando rastros de él. Pero no había  nadie. Todo  estaba tranquilo y vacío.  Menos el agua que aún se encontraba   turbia. Y en  el fondo  logre ver algo, pero no sabía que era.  Espere unos minutos pensado que todo sería una broma de parte de mi amigo. Cada vez pasaba más  el tiempo y yo ya me estaba asustando. Volvía a ver todos los alrededores esperando que en algún momento  mi amigo saliera sorprendiendo me. Pero no, así  que no espere más  y salí  corriendo en búsqueda de la entrenadora. No la encontraba por ningún  lado y tampoco había nadie, eso se me hizo muy raro, aún así continué  buscando a la entrenadora. Hasta que pase por los salones y me sorprendió que  nadie se encontraban  en sus clases. No espere más  y salí afuera;  ahí  fue dónde me encontré con todos muy despavoridos. La entrenadora fue la primera que me explicó lo sucedido, y no dudo en preguntarme por Paiper. Yo seguía  en shock....
- Bien no es  necesario que me cuentes esa parte joven chet. Mis compañeros ya tienes esa información. Así que no prosigas. 
- Esta bien. Le dijo compresivo.
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Residencia  Nomus

En la residencia Nomus  el jefe Dayton y sus socios Martin , Leo y Saymon están ideando formas seguras, claras y exitosas de llevar a cabo el plan  del intercambio. Las cosas están saliendo a su favor por el  momento. Por otro lado tienen que  estar pendiente de que el chico coopere, de manera  qué lo planeado no se desmorone.

-Creen qué el Muchacho haga bien lo que se le pide ? Pregunta Martín poco  convencido.
- Claro que lo hará. Decía  Saymon exaltado.
- Y sino,  pues se le enseña de otra forma mucho  más  efectiva. Les aclaraba  y aseguraba a sus compañeros, mientras sostenía su arma y la recargaba desafiante. Todos sonreían  en la habitación, excepto Leo, que enseguida habló.
- Tú siempre  resuelves todo  con violencia. Se revela  Leo. El chico debe de estar confundido y lleno de miedo por lo que les han hecho vivir en estas 24 horas cautivo. Y aún le quieren agregar más  traumas?
- Ay tú Siempre tan considerado el lioncito. Meo meo. Decía burlón Martín. Leo lo ignoro, y continuo  expresando su desagrado con Saymon. Pero Saymon se adelanto  mostrando su enojo.