YOU ARE MY BEST TORMENT

LEE VAUSE- Cap Extra

Muchos me conocen como Lee Vause el empresario más famoso y rico de New York, pero lo que no muchos saben y no ven es que soy un padre amoroso. Desde muy pequeño nací en una buena familia con un buen apellido, mis padres tenían una gran empresa la cual yo heredaría después.

Cuando era más joven me enamore de una hermosa mujer llamada Diane Miller y creí que ella iba a ser el amor de mi vida, mi compañera de por vida, pero eso no fue así. Diane y yo nos casamos pero nuestro matrimonio no fue muy bueno ya que Diane cambio mucho, antes era una mujer cariñosa, amorosa y atenta conmigo pero luego de la boda se volvió fría y comenzó a viajar mucho, hasta que un día supimos que íbamos a ser padres y llegue a pensar que con la llegada de nuestro bebé ella volvería a ser la misma de antes, pero nuevamente no fue así. Ni siquiera con el nacimiento de nuestra hermosa hija a la que llame Alexandra Vause, Diane no se quedó en casa.

Ya cansado de eso le exigí el divorcio y la custodia total de mi hija, Diane me dio ambos con la condición de que le pasara dinero al menos, por lo que sabiendo que solo así tendría mi libertad y la custodio de mi pequeña acepte el trato quedando como un padre soltero. Eso a mí no me importo ya que lo único que me importaba en ese momento era mi hermosa princesa. Al principio fue difícil cuidar de Alex y estar pendiente de la empresa, por lo que me decidí en contratar una niñera que pudiera cuidar a mi pequeña mientras yo trabajaba.

Y ahí fue cuando apareció Red, esa hermosa mujer que llego a cambiar mi vida. Jamás creí que al contratarla fuera a formar parte de la familia tan íntimamente. Ella era amable, cariñosa y amorosa con Alex algo que no era Diane con su propia hija. cuando Alex tenía un año dijo su primera palabra y fue Mamá y esa palabra se la dijo a la mismísima Red quien lloro al escuchar a mi pequeña decirle así mientras la abrazaba cariñosamente, al ver eso me arme de valor y le confesé mis sentimientos a Red, los cuales fueron correspondidos de la misma manera, así que comenzamos una linda relación y tres años más adelante cuando ya mi hija tenía cuatro años nos casamos y dos años después tuvimos otra hermosa hija a quien llamamos Nicky Nichols Vause .

Al fin era un hombre feliz con mis dos hermosas hijas y mi linda mujer. Diane a veces venía a ver a Alex, mi hija se portaba educada y amable con ella pero nunca fue cariñosa con su madre como lo era con Red.

Alex siempre fue y será la luz de mis ojos, ella desde muy pequeña demostró ser muy valiosa, fuerte e inteligente, nunca se dejó pisotear de nadie y siempre defendía a su hermana. A ambas las educamos con amor y con muchos valores. Al ver crecer a mis hijas siempre las imagine casadas con unos buenos hombres, pero como la vida me ha enseñado a ver que todo no es lo que parece. Y eso lo supe cuando sin querer escuche una conversación entre mi hija y mi esposa, en donde Alex llorando le confesaba a Red sus gustos por las mujeres y el miedo que sentía si yo lo llegaba a saber y más por nuestro apellido.

Al escuchar eso me sorprendí y no me mal entiendan, no estaba en contra de los gustos de mi hija es solo que como padre siempre soñamos con verlas casadas con un buen chico. Aunque al escuchar a mi hija así de vulnerable entre a su cuarto y la abrace ya que un gran instinto paternal creció en mí. En ese momento le dije que la amaba le gustara quien le gustara que mi amor por ella no iba a cambiar jamás y que nunca se preocupara por nuestro apellido ya que lo más importante era su felicidad.

Le dije eso aun pensando en que sus gustos llegarían a ser pasajeros pero al pasar los años me di cuenta que no lo era. La prensa en ese tiempo se escandalizo cuando supo de los gustos de mis hijas si como leen, ya que mi pequeña Nicky también resulto ser gay, pero como antes dije nada de eso me importo solo la felicidad de mis pequeñas importaba.

Alex tuvo muchos problemas con las mujeres, ya que la mayoría iban por su apellido o su dinero, al ver que solo iban por eso ella empezó a estar con una mujer y otra. No me gustaba eso de mi pequeña pero ella debía aprender sola a que la vida no siempre iba a ser así y contaba con que pareciera esa mujer por la cual ella lo diera todo, así como yo lo haría por Red y por ellas