Un poco más cerca.

2.1K 247 69
                                    

—Ya les dije que se caerá por si solo —la mujer suspiró cansada —además no entiendo porque tanto drama, si nada más han pasado dos días desde que terminaron así.

Tsunade se encontraba en el hospital de Konoha tratando de hacer razonar a los dos adolescentes, pero aunque ellos no dijeran nada se notaba que algo andaba mal.

—Ya sabemos eso, abuela —el pequeño blondo hablaba más bajo de lo normal —es sólo que queríamos ver si había algo que pudieras hacer para liberarnos antes de los cuatro días.

Esa seriedad le comenzaba a preocupar a rubia, Naruto nunca era así de callado, tampoco solía evadirle la mirada, y el tono de voz denotaba tristeza absoluta.

Por otro lado miró al azabache, quien parecía ajeno a la situación y solo mostraba su cara de aburrimiento.

—Mocoso tenemos que hablar —quería respuestas, no le gustaba ver al menor así. Con un rápido movimiento de manos, creo un jutsu similar a una barrera de silencio, donde todo lo que dijera sólo lo podía escuchar Uzumaki y ella.

—¿Qué es esto? —volteó a ver a su compañero de equipo y observó que el tenía la misma expresión de sorpresa.

—Es para tener más privacidad, ahora habla —se cruzó de brazos y lo miró fijamente.

—No sé a qué te refieres... —su voz se fue apagando al ver esos ojos avellana furiosos — soy una molestia para Sasuke —admitió mientras miraba al piso una vez más —no quiero que mi presencia le desagrade más, por eso quiero que nos ayudes a quitarnos esto —señaló su mano unida a la del Uchiha.

Desde otra perspectiva Sasuke miraba a detalle la escena, si bien no escuchaba nada, ver los gestos de Naruto era suficiente para entender que el oji-azul se sentía triste, incluso podía asegurar que de no ser por estar ellos, se pondría a llorar en cualquier esquina solitaria.

Un sentimiento de remordimiento se instaló en su pecho, era ilógico quizá pero sentía que tenía parte de culpa. Era consciente de que su actitud con el chico no había sido la mejor, sin embargo desde la primera noche que habían pasado juntos había notado algo extraño.

▪▪▪
Dos noches antes.

Naruto y Sasuke se encontraban en la casa de este último, quien había ordenado prácticamente que se quedarían por esos días ahí, y aunque el rubio protestó al final terminó aceptando.

—¿Qué tanto ves, dobe? —preguntó al notar que estaba con la mirada pérdida.

—Nada, es sólo que tu casa es muy bonita, teme —mostró su característica sonrisa sincera, por lo que decía era verdad, el hogar de su amigo lucía mucho mejor que el suyo y no lo decía en un tono de envidia ni nada; simplemente se alegraba de que el moreno no tuviera que ver un lugar tan triste y carente de luminosidad.

—No es la gran cosa —levantó un poco sus hombros en señal de indiferencia. Después de un silencio un tanto incómodo, Naruto soltó una pequeña risa —¿qué es tan gracioso?

—No me estoy  burlando de algo, Sasuke —se detuvó un poco antes de continuar hablando —es sólo que me siento algo feliz de tener compañía por algunos días.

—Como digas, usuratonkashi —decidió no continuar más con el tema y caminó hasta su habitación obligando al blondo a avanzar también.

Uchiha no lo admitiría en voz alta pero una parte suya se alegró igual por la nueva compañía que tendría esos días.

Las horas pasaron y ambos jóvenes estaban recostados, Naruto por su parte dormía de lo más cómodo, prueba de ello eran sus leves ronquidos. Pero por otro lado, Sasuke no podía dormir.

¿Una cita? (NaruSasu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora