I keep waiting... | Harry Styles |

Capitulo 2.

Después de esa amistosa platica que tuvieron ambos, el joven Styles la tomo del brazo y comenzaron a andar; cruzaron la puerta de la estación de tren; desconociendo la nueva historia que apenas comenzaba.

_______.

— Entonces, Harry... ¿Vives aquí? O ¿solo estás de visita?— le pregunté ya que el silencio se estaba volviendo incómodo.

—Aquí nací y aquí he vivido toda mi vida hasta ahora, junto a mis padres; aunque recientemente me mudé a una casa no muy lejos a la anterior. ¿Y tu? ¿Vienes a visitar a alguien?— preguntó el mientras continuábamos caminando.

—Si, vine a visitar a mi tía Helena. Es la primera vez que vengo a este pueblo así que, no se exactamente donde queda su casa. —respondí algo nerviosa  ya que Harry me miraba fijamente.

—¿Te parece si está tarde o cuando estés libre, te enseño el pueblo? Y si quieres, podemos ir a comer a un restaurante que inauguraron la semana pasada.— preguntó el sonriendo amablemente.

—Me parece buena idea. Mañana a medio día. ¿Te parece?— le pregunté esperando que no estuviera ocupado a esa hora.

—Me parece genial.— Harry sonrió con esa hermosa sonrisa suya... Sé que no debería pensar en eso ya que lo acabo de conocer pero, simplemente es imposible no fijarse en el. Le devolví la sonrisa y continuamos caminando hacia la casa de mi tía. Le di la dirección exacta y llegamos rápido; al parecer el conoce bien las calles. Mencionó también que su casa no queda muy lejos de la de mi tía.

—Aquí estamos.—dijo el enfrente de la puerta de la que se supone, es la casa de mi tía.

—Muchísimas gracias, Harry. De verdad, de no ser por ti, creo que jamás hubiera podido llegar. — le agradecí sinceramente mientras le sonreía y el me devolvía la sonrisa.

—No es nada, me es un placer ayudarte, _______. Bueno, entonces paso por ti mañana al mediodía. Hasta luego.— dijo él tomando mi mano entre las suyas y depositando un beso en ella. Eso provocó que me sonrojara demasiado. El río bajo y se fue alejando haciendo un ademán con la mano de despedida.

—Hasta luego, Harry.— dije para mi misma ya que el iba muy lejos como para poder escucharme. Sonreí como una tonta al recordar lo que acababa de pasar.

Cuando por fin salí de mi nube, toqué la puerta y se escuchó un "ya van" que al parecer, fue mi tía. Cuando la puerta se abrió, por ésta apareció ella; sonrío de oreja a oreja y me abrazó fuertemente. Yo con gusto se lo devolví.

—¡______!, mira que grande estás. Hace tanto que no te veía. Pasa, pasa, no te quedes afuera, estás en tu casa. — dijo ella tan cariñosa como la recordaba. Hace casi 3 años que no la veo. Es por eso que decidí venir a visitarla.

— Siento no haber venido antes pero estuve muy ocupada con eso de la secundaria, ¡sólo un año más y me gradúo! — dije alegremente.

— Está bien, no te preocupes. ¡Qué bueno que ya estás aquí!, tengo muchas cosas que contarte.—  dijo emocionada por mi llegada. — Por cierto, _____, ¿quién era el jóven que te acompañó hasta acá? creo haber oído una voz afuera a parte de la tuya. — me preguntó alzando una ceja a lo que yo, me sonrojé.

— Oh, él es Harry. Estaba en la estación de tren cuando llegué así que, decidí preguntarle donde quedaba la dirección y él se ofreció a acompañarme.— 

—De acuerdo, está bien.— dijo ríendo burlonamente. — Y... ¿está guapo?— preguntó ella alzando una ceja. Me sonrojé como un tomate.

— Tía, ¿es enserio?— pregunté más roja de lo normal. 

—  Lo siento, ¡tenía que preguntar! — dijo ella mientras continuaba riendo.—Pero enserio, dime, ¿está guapo?— 

— Si tía, si está guapo. — dije riendo con ella.

— ¡Oh, que bien! ¿porqué no salen algún día?— 

 —La verdad, saldré con él mañana a medio día. Me enseñará el pueblo y dijo que iríamos a un restaurante que acaban de inaugurar.— le dije sonríendo.

— ¡Wow!, menos de media hora en el pueblo y ya tienes a un chico detrás de ti. — dijo ella riendo. Creo que le gusta reír mucho.

— ¡TÍA!, ¡BASTA! Sólo es mi amigo y mañana iremos a dar un paseo por el pueblo, es todo.— 

— Está bien, ____, no te alteres. Yo mañana te ayudo a arreglarte. ¡Ven, vamos!, acabo de prepar la comida, tenemos muchas cosas que contarnos. — dijo ella tomando mis maletas y poniéndolas a un lado del sillón. Me hizo una seña con la mano para que la acompañara a la cocina donde olía delicioso y es que la verdad, me estaba muriendo de hambre.

Después de hablar con mi tía sobre nuestras vidas en estos 3 años que no nos veíamos, fuí a desempacar mis cosas y a ver que me pondría mañana para salir con Harry. Parece ser buena persona. ''Tal vez lleguemos a ser grandes amigos''.