Hope On The Way

Palabras sinceras que expresa tu conciente

Al principio actuábamos de forma natural, ya saben «Lo normal» algo que todos somos capaces de hacer, o al menos eso creía.

Podemos vivir nuestras vidas como cualquier otro, podemos casarnos y tener hijos, formar un lindo hogar y una linda familia.

Sin embargo, existe un momento donde esa delgada línea de felicidad, paz y normalidad se desvanece, desaparece tan rápido como las gotas de lluvia en la maldita ventana, desaparecen tan rápido como los insólitos relámpagos en el cielo oscurecido durante una tormenta, momentos donde nos perdemos en nuestros propios pensamientos y divagamos en nuestra mente como si nuestra vida dependiera de ello, buscando alivio, buscando consuelo, y ¿por qué no? Buscando descansar en paz.

Y no, no hablo de morir, hago referencia a que nuestra alma descanse en paz. Ya saben, que nuestra mente deje atrás toda la mierda que ocurre en este asqueroso mundo, así como todos nuestros pecados, buscar ser libres y olvidar lo mal que la vida nos ha tratado, pensar que con el pasar de los días puedas volver a ser la persona que deseaste ser, o quizás fuiste.

Dejar atrás la persona malvada, cínica y fría, que trataba mal a todos, esa parte agresiva que llegaba al punto del autodesprecio.

Aun sin saber la razón, sigues buscando paz en el camino, y aunque es algo que puede resultar irónico o divertido, de alguna forma te consume.

El no poder dormir bien, no comer bien y no tratar bien.

De un tiempo a otro todo comenzó a mejorar, parecía que esa fiera salvaje que quería brincar y comerse a todos los que se le acercarán se estaba calmando...

Pero, por desgracia tuviste que morir...

Para ser sincero yo acepto la muerte como algo natural de la vida pues, y es algo que en algún momento nos pasa a todos.

Creo que desde tu partida todo cambio significativamente, como le pasa a cualquiera que sin aviso previo ni preparación pierde a una de las personas que más amó, o eso creo, empecé a tener sueños extraños en los cuales despertaba con las más gruesas lágrimas en mi rostro y el corazón a mil por hora.

He vivido tantas cosas en este tiempo, que siento que nadie me puede parar, siento que hago el bien pero también hago el mal, quiero gritar, llorar, correr, decir malas palabras y tratar mal a todos...

De verdad siento que es la única forma de liberarme, de sentirme bien conmigo, y tal vez suene algo descabellado pero es lo que me pide mi alma.

A veces hacemos las cosas, ni siquiera esperando algo a cambio, porque sabemos que eso está absolutamente mal, pero con la mentalidad de que en algún momento esa persona o quien sea te trate a ti de la misma forma, o puedas recibir el mismo trato que tú diste, y cuando te fijas, simplemente no hay nada...

Pensarás que me están cuidando bien y que no estoy solo, pero la verdad todavía no he encontrado esa persona que se apiade de mi alma, solo somos tu y yo, tu en el cielo y yo en la tierra, sé que te decepciona eso, pero no te preocupes mi amor, pronto seremos de nuevo tu y yo, en la tierra o en el cielo, nuestras almas fueron destinadas y selladas con el amor que no puedes encontrar en ningún lado.

No te esfuerces tanto en decorar la entrada para recibirme a tu lado, sabes que con tu sola presencia yo soy feliz.