El chico de la luna ||TaeGyu||

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°•Final no original•°

¿Alguna vez les conté como llego BeomGyu a la Luna? creo que no, preparen los pañuelos, las cabritas y acomodense que esto será largo.

Okey, si los guardianes llegan por los actos de buen corazón ¿no?. O al menos asi llego Soobin, en fin.

Luna, una justiciera diosa caminaba por la tierra viendo quien necesitaba de sus guardianes con una gran sonrisa, hasta que llegó a un río en donde se escuchaba un llanto, ella fue a revisar y... un bebé ¿quien era tan malo para abandonarlo?. Ella se acerco al pequeño y lo tomo en sus brazos, su carita inocente derramaba lágrima tras lágrima, eso conmovió a la diosa y se lo llevo a la luna con ella, lo crio como si fuera de su propio vientre. Esa era una de las razones por las que era tan inocente y puro, fue criado por la misma diosa y ella estaba orgullosa del gran niño que había criado.

Ahora vamos con la razón de que los padres lo abandonaron...

Ellos no eran de muy buenos recursos, vivían en una pequeña casa humilde de no mas grande que una habitación, solo eran ellos y el echo de tener un bebé los destrozó ¿como cuidarian de tal criatura si no pueden ni matenerse ellos?, no querían abandonarlo, tampoco tenían dinero como para pagar algún aborto y no lo dejarían en un hogar de niños, esos lugares nunca eran bueno, asique a los meses de nacer; mas o menos unos 2 meses que lo pudieron mantener; lo dejaron en el río, ¿que si les dolió? lloraron como nunca pero tal vez era lo mejor para el bebé, desde entonces le rezaban a todo dios o ser poderoso de que su pequeño e indefenso BeomGyu allá encontrado un mejor hogar del que ellos le dieron, uno con buenas personas que sepan valorar el gran niño en el que convertirá a futuro.

Una linda pero dolorosa historia, ¿no?.

—¿Como has estado Beomie?—Dijo la peli castaña separandose del abrazo.

—Bien—Sonrio—¿y usted?

—Muy bien también —Sonrio.—Como me alegro de que mi niño este bien, aunque eres un mentiroso—Dijo le tiro un poquito un pelito, lo suficiente para que le duela, pero no mucho—¿Que te e dicho de mentirle a tu madre?

—Que no se hace... lo siento. Pero de verdad estoy bien...

—Beom, te conozco. —Dijo ella y se dirigió a la cama para sentarse y después palmear a su lado para que su hijo se siente a su lado cosa que BeomGyu obedecio—Tendremos una larga charla de madre e hijo. Ahora, ¿por qué estas asi?

—¿Asi como?

La mujer suspiro y ideó una manera de que su hijo le contara que es lo que le pasa.

—Sabes, después toquemos el tema. ¿Como te a ido con el mortal que te di? ¿no has echo nada malo o algo que lo perjudique, cierto?.

—Mmh... bien—Sonrio al recordar al peli rojo—y no, no e echo nada malo... Según yo.