Era una noche algo fría salí a caminar y mientras caminaba bajo la luz de la luna pensaba en lo complicado de la vida, camine por horas sin notar el tiempo transcurrido y ya cansado me dirigí de vuelta a casa.
Al llegar a casa noté un gran brillo, entre y con afán subí a ver que era y era una estrella en mi terraza perdido al ver algo tan imposible y asombroso, porque seamos realistas las estrellas no se encuentran en terrazas, no es como encontrar un dólar en la calle y quien me creería, por un momento creí que era producto de mi imaginación.
Me tomo un tiempo para pensar si lo que estaba viendo era real, pero al final decidí acercarme para constatar que lo que veía era tan real como el mismo cielo. Y sí, era real y no lo podía creer que algo tan hermoso estaba en mi terraza y me pregunté_¿Cómo pudo ver llegado una estrella hasta mi terraza? en mi cabeza se formaron miles de teorías unas muy locas y otras muy complejas.
Aquella noche decidí ocultar a la estrella en una de mis habitaciones, era una estrella muy pesada y de gran tamaño.
Esa noche no logre dormir pensando y pensando como llego a mi terraza, decido a saber como había llegado e investigue mucho, leí libros en busca de información, busque en el navegador, consulte a experto pero era un simple loco preguntando cosas imposible, y no los culpo pensaría lo mismo si no me hubiera pasado a mí.
Pasaron día, noches, semanas y meses y esa estrella latente seguía en una de mis habitaciones. Un día mientras llegaba de mi trabajo exhausto por todo el trabajo acumulado me tope con la gran sorpresa de que la estrella había dejado de brillar pensé que había muerto o algo así, triste y desorientado sin saber que fue lo que había pasado salí de la habitación y me dirigí al balcón a pensar y una vez más sin encontrar respuesta para algo imposible me fui a dormir, de repente me desperté muy asustado se escuchaba un gran alboroto, me levante asustado creyendo que alguien había entrado, corrí y había una joven descubierta, con cabellera larga y blanca como la nieve, tirando las cosas de habitación produciendo un gran estruendo, confundido sin saber de adonde había salido trate de preguntarle quien era y como había entrado, pero se limitaba a mirarme como si no entendiera lo que le decía y de repente note que la estrella no estaba en su lugar.
Olvide por un momento la estrella y le ofrecí a aquella joven algo para cubrirse, sin comprender que pasaba trate de ayudarla y de obtener información de quién era. Al querer cubrirla se lanzó hacia atrás muy asustada, empezó a billar como tal estrella brillante y entonces comprendí que era la estrella o al menos había salido de ahí.
Paso la noche, los días, semanas, y cada día que pasaba nos acercábamos más, ella cada día aprendía algo nuevo era como niño, y yo aprendía de ella.
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Cuando estaba asustada o feliz brillaba, cuando estaba triste o molesta se podía sentir su luz apagada, y así fueron pasando los meses, fueron pasando momentos, aventuras y recuerdos convirtiendo mi corazón uno con el de ella, sintiendo que lo que sentíamos sería eterno con este amor que nació como ella un día lo hizo de aquella estrella. Pero así como día apareció en lo alto de mi terraza una mañana desapareció sin un adiós, sin nada, solo recuerdos y un vació imposible de llenar.
Cada noche salgo a caminar para volver con la esperanza de encontrarla esperándome, pero, cada noche me topo con la oscura y triste realidad de que no esta y que quizás no vuelva más.
Sé que las estrellas no las encuentras en tus terrazas, o al salir a correr o en un paseo en el campo, pero, ella fue la experiencia más loca y hermosa que me pudo pasar, una estrella en mi terraza, que vivirá por siempre en mi corazón y que me dejo con la luz de su amor, una luz que nada podrá apagar.
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