A través de mi pantalla.

1.L&H

Eran aproximadamente las 7 de la mañana, un frío día de Invierno. Louis fue directo a la cocina después de vestirse a servirse un café caliente con chocolate como el que solía hacerle su madre.

Se sentó en el banco más alto de la cocina y prendió la televisión, decidido a hacer lo de siempre: criticar a ese tal chico llamado Harry Styles que sus hermanas amaban por alguna razón.

Louis Tomlinson siempre fue reservado, y a su vez vivía aparentando algo que no era, aunque lo último aún no lo sabía. Se pasaba noches soñando con lo que más deseaba en este mundo: ser conocido por su música y hacer
feliz a la gente; conseguir provocar esa felicidad que tantas veces se le había sido arrebatada en su aún temprana vida. El único problema: su inseguridad. Jamás había cantado frente a nadie, y mucho menos había pensado en asistir a clases de los instrumentos que le interesaban, ya que era una pérdida de tiempo por lo inútil que se consideraba. De todas formas, desde los 7 años se sentaba todos los lunes a aprender teoría sobre la manera correcta de vocalizar, las notas que se utilizaban en sus canciones favoritas y de vez en cuando se memorizaba tutoriales de youtube completos.

En su rutina, lo único que lo hacía sentir mejor era prender la televisión cada mañana temprano para ver a esa cara en la pantalla que había abandonado la fama para ser un chico "normal", Harry Styles.

Harry provenía de una familia clase media-alta, un adolescente de 1,80m. con un largo cabello castaño en el que abundaban los rizos. Había nacido a unas horas de donde residía Louis, pero con un asombroso don: sabía tocar una gran cantidad de instrumentos, además de la maravillosa voz que poseía. Tenía básicamente toda su vida resuelta, había ganado varios premios de revelación infantil y juvenil, pero lo que nadie esperaba es que el chico a sus 15 años se rebele y deje todo tipo de contacto con el mundo del espectáculo. Desde ese entonces, lo único que se veía en las noticias era su cara.