Ben 10 Omniverse: la historia continua.

Capitulo 4 supremos

   Rad, Rook, Kai y Rook Ben estaban mirando a los Necroffiggian bebes emocionados y asombrados por la belleza de ese tan asombroso espectáculo, sin darse cuenta la reacción de los demás que no veían nada más que un mal recuerdo, Kai se dio vuelta y se preocupó al ver a los otros aterrorizados.

   Kai: ¿Qué pasó? ¿Cómo no pueden disfrutar de este tan maravilloso espectáculo?

   Kevin: Es que... Kai no lo entenderías.

  Los demás se dieron la vuelta al escuchar la conversación.

   Rook: ¿Qué no entendería?

   Gwen: Rad te fijaste que esas crías eran de un color distinto al usual.

   Rad: Pues ahora que lo dices si eran de un color peculiar que no conocía que existía en esa especie.

    Kevin: Pues es que ese color no es de esa especie, no por ahora por lo menos, esas son crías supremas.

   Rook: Espera... Acabas de decir ¿Supremas?

   Kevin: sí.

   Rook: ¿Supremos no era el nombre esos aliens raros de Albedo?

    Ben asiente, Rook supo la gravedad de la situación y avisa a Rook Ben que se valla a una habitación, Rook Ben iba a debatir con Rook pero supo por su expresión que la cosa era grave y accedió, Rook una vez visto al niño irse se dirigió a Rad y le aviso que rastreara el trayecto de las crías y supiera su procedencia, Rad accedió avisándole a Pixie y está rastreo su procedencia, Pixie preguntó si querían fijar la trayectoria hacia ese planeta, lo que Rad y Rook accedieron, Ben al escuchar esas palabras solo se puso más preocupado, la nave salto al hiperespacio, Ben no podía decir ni una palabra y de repente empezó a recordar sus experiencias con los supremos, la vez que casi mató a Kevin cómo Eco Eco Supremo, las veces que con Frío Supremo dejaba con un gran dolor a los que congelaba al borde de la muerte, la vez que Albedo se alió con Vilgax y lo atacó con Humongosaurio Supremo, la vez que Albedo regreso poniéndolo en apuros con unas nuevas formas supremas y la más importante y traumática, la vez que los supremos cobraron vida y lo encerraron en el Omnitrix donde lo intentaron asesinar y que gracias a Kevin que trajo a Azmuth que los libero y les dio su propio planeta, a Ben le aterra la idea de ir al mismo lugar donde están 6 alienígenas ultra poderosos que lo intentaron asesinar, no paso mucho hasta Ben se dio cuenta que enfrente suyo se ganaba un planeta con un solo continente, Ben solo estaba aún más aterrorizado, la nave aterrizó en una pradera, todos bajaron en posición de ataque, al ver que no se veía nada a la distancia bajaron la guardia.

   Rad: Aquí no hay nada. ¿Ben me puedes decir cuántos de esos "Supremos" se supone que tienen que haber en este planeta?

   Ben no responde.

   Gwen: Deberían haber 6.

   Rad: Si solo hay esa cantidad será prácticamente imposible hallarlos en todo este planeta.

   De pronto en la distancia se ve un destello plateado que se iba acercando a una alta velocidad, Ben se da cuenta de inmediato y activa el Omnitrix esperando que esté le de el Alien correcto para parar esa bola plateada picuda que se acercaba a gran velocidad, el Omnitrix lo transformó en nadie más que Atomix, Atomix voló y se puso enfrente posicionando sus manos enfrente, la bola plateada impacto con Atomix, Atomix intentaba sostener con todas sus fuerzas mientras retrocedía por la inmensa fuerza de la bola plateada, sorprendentemente la bola plateada retrocedió y Atomix se alivió solo para que se diera cuenta que se acercaban una cantidad abismal de discos, el Omnitrix no duró nada en destranformarlo y transformarlo en Bloxx, Bloxx supo inmediatamente que hacer y rodeo a su grupo y a la nave, los discos se posicionaron alrededor de Bloxx emitiendo un fuerte sonido que estremeció el terreno, Bloxx tenía que aguantar un tremendo dolor que duró un largo rato de repente el ataque sonoro desapareció solo para que después se escuchará un cañonazo y un misil hizo una explosión en una parte del escudo de Bloxx donde estaba el grupo, ellos se pusieron en modo de ataque y enfrente de ellos aparecía un gigante verde con unos ojos rojos que brillaban de forma intimidante mientras se tronaba los dedos y hacia una tenebrosa sonrisa.