"El Último Baile"

Toma 3 - 4 y Final...

SAKURA KINOMOTO:

Aún recuerdo la última conversación que tuvimos, de hecho fue la última vez que lo vi y que me dirigió la palabra.

Era un día de invierno, era diciembre y yo había decidido contarle toda la verdad, contarle sobre el taller de integración y sobre mis sentimientos, esos sentimientos que gracias a el crecían cada día más y más en mi interior.

Me dirigía a la cancha de fútbol ya que recordé que tenia entrenamiento pero en el camino me encontré con Tsuyoshi Yama el encargado de dirigir el Periódico escolar y de las actividades curriculares, el para mi siempre ha sido un muy buen amigo.

Charlamos un poco de las cosas de la vida y también el me comentaba que me encontraba distinta, radiante, diferente a la de antes y que el pensaba que era por que cupido había golpeado a mi puerta.

Yo solo sonreía al escuchar esas palabras y le comente que estaba profundamente enamorada.

El me toma la mano y me la beso, encontré media extraña esa reacción de Tsuyoshi pero después recordé que el siempre ha sido muy expresivo y cariñoso conmigo, a los segundos me abraza y me susurra al oído: "Suerte con esa persona ya que tú eres una mujer muy especial y te mereces ser feliz"

A los minutos vi pasar a varios compañeros de Shaoran que venían de los camarines pero el no salía, así que me despedí de mi amigo y decidí ir en su búsqueda.

Llegue al pasillo de los casilleros y ahí lo vi estaba en el suyo, me dirigí un tanto nerviosa pero a la vez ansiosa, sentía que mis rodillas temblaban y pensé que mi corazón se saldría por la boca, hasta que llegue ahí diciéndole muy entusiasmada: Shaoran te he estado buscando todo el día.

El tenia su rostro tapado con la puerta de su casillero y a los segundos me contesto: Si claro – lo dice con un tono sarcástico he inmediatamente me vuelve a decir – eres una mentirosa.

¿Mentirosa? – me pregunte a mi misma y le dije: ¿Qué?

– Lo que escuchaste – me contesto mirando aún el interior de su casillero – te burlaste todo este tiempo de mi.

– Yo – le dije quedándome callada unos segundos ya que estaba tratando de pensar y analizar sus palabras – ¿No entiendo a lo que te refieres Shaoran?

– Para ti soy Li – me mira serio – y que te quede claro Kinomoto.

Sentí que se me derrumbaba el mundo al escuchar esas frías palabras, cerró su casillero y comenzó a caminar, yo por reflejo le tome el brazo preguntandole: ¿Por qué me hablas con ese tono y me miras de esa forma?

El saco su brazo de mi agarre y enojado me dice: Yo soy así y eso lo sabes de sobra, si te gusta bien y si no te puedes ir.

– No me trates así por favor – le conteste rápidamente.

Pero el solo miraba el horizonte y con esa mirada un poco arrogante y altanera que tanto lo caracterizaban.

¿Cómo pueden haber cambiado tanto las cosas en solo segundos? – me preguntaba, sentía ganas de llorar pero tenía que ser fuerte para decirle, más bien dicho para confesarle mi amor por el, así que trague en seco y le dije armándome de valor: Necesito decirte algo muy importante, algo que nos concierne a los dos.

– Yo no quiero escuchar nada que venga de ti –.

Esas fueron las únicas palabras que escuche de el, esa fue su respuesta, lo mire y luego agache mi mirada, mientras caín lágrimas por mis mejillas... fui una tonta me deje enamorar tan fácilmente para luego estar sufriendo.