Único.

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(¿Alguna vez te preocupaste de que todo se echara a perder? ¿Y te dan ganas de llorar?)

A ella le gustaba Ray. No, corrijo, ella está enamorada de Ray; con sorpresa, se cubre la boca mientras el rubor le quema las mejillas y las lágrimas comienzan a aparecer.

¿Por qué? ¿Por qué está pasando esto? Ella sólo fue el apoyo de Ray cuando estaba buscando a Emma. Únicamente se hicieron más unidos en ese lapso, donde él se permitió hondar más en su amistad con ella, y ella, de conocerlo mejor y experimentar la cercanía que Emma alguna vez experimentó con él.

Además, por culpa de sus sentimientos, su amistad se iría al caño, al desagüe. Y no quería eso, no soportaría que Ray se sintiera incómodo a su alrededor y que se terminara alejando por eso.

De sólo pensar esa posibilidad, le daban ganas de llorar.

(¿Por qué nos enamoramos tan fácilmente? Incluso cuando no está bien.)

Tuvo que hacer titánicos esfuerzos, por mantenerse al margen con sus sentimientos y seguir tratando a Ray con naturalidad. Cuando ella solamente, terminaba enamorándose más al verlo sonreír o cuando él le contaba cosas que ni a Norman, quien se supone es su mejor amigo o a Emma (en su momento), le contaría.

Gilda se cuestionaba por qué se vino a enamorar de Ray. Que sí, él era guapo y que su color de ojos, le resultaba fascinante pero... ¿Por qué él y no alguien más?

Aquello sólo hacía doler más su corazón, y que un nudo en su garganta se presentara, teniendo que sonreír para que no le doliese tanto. Y siempre contestar "Sí", ante su pregunta de que si ella estaba bien.

(Cuando estás ahí afuera, haciendo lo que haces...

¿Sólo estás sobreviviendo?

Dime, ¿Sólo estás sobreviviendo?)

- Gilda, por favor, dime la verdad – estaba harto de tantos "Sí, Ray, estoy bien" y de tantas sonrisas falsas, que decidió encararla al ver que ella no hablaría con la verdad. Y aunque odiara hacer las cosas por la fuerza, no tenía opción, por ello, se la llevó a un parque cerca de la casa para hablar a solas –, ¿En verdad te encuentras bien?

Gilda lo miró, pasmada, con las manos temblándole levemente a ambos lados. Ray la miraba, atento a sus reacciones y acciones, en espera de una respuesta; Gilda pasó saliva con dificultad y miró al suelo.

(Donde hay un deseo, va a haber una flama...

Donde hay una flama, alguien debe quemarse...

Pero sólo porque queme, no significa que te vas a morir...

Tienes que levantarte e intentarlo.)

Dudaba, si decirle o no la verdad. Porque él se veía feliz con Emma devuelta, al igual que Norman y todos los demás. Y decir que ella no estaba contenta, sería mentirse a sí misma... Pero, ¿Qué pasa si Ray tenía sentimientos por Emma y...la rechaza a ella?

(Tienes que levantarte e intentarlo. Intentarlo. Intentarlo... Intentarlo.)

Apretó las manos en puño, ¿Qué importaba si era rechazada? Siempre podía decirle que fuesen simplemente amigos... Y tal vez, intentarlo, otra vez.

(Tienes que levantarte e intentarlo. Intentarlo. Intentarlo... Intentarlo.)

Levantó la mirada, y con algunas lágrimas en sus orbes grisáceas, lo miró con una pequeña sonrisa. Ray lo miró algo sorprendido, y más cuando ella pronunció:

- Perdón Ray, pero yo, estoy enamorada de ti – el viento hacía ondear los mechones de cabello oliva de ambos lados de su rostro. Los cuales, ella peinó detrás de sus orejas, con una débil sonrisa –. Todo este tiempo... Perdón por mentirte.

La miró en silencio un instante, procesando sus palabras, para poder darle una respuesta; y con semblante serio preguntó –. ¿Por qué te disculpas por tus sentimientos? – Gilda lo miró sorprendida –. El amor es algo que puede sucederle a cualquiera y, todos tenemos derecho a enamorarnos de quienes queramos... No te vuelvas a disculpar por ello. A mí no me molestan tus sentimientos.

- ...Pero...

- Y si piensas que me gusta Emma, pues sí, me gustó... Pero ahora, sólo es una preciada amiga para mí – contestó, sereno, mirando el atardecer que caía, en esos momentos. Gilda no podía creerlo –. Porque... Quien me gusta ahora, eres tú.

(Inténtalo.)

- Ray... – lo llamó, suavemente, algo nerviosa de lo que iba a decir, lo que la hizo reír. Él la miró, esperando a que terminara de hablar –, ¿Quieres ser...mi novio?

Él sonrió, divertido por cómo se estaban dando las cosas, pero también, feliz –. Sí.

(Solamente es cuestión de intentarlo y seguir intentando.)

-Traumada Taisho

Final abierto = Todas las shipp son reales.

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