Los Sentimientos De Teddy

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Narra James//

Teddy esa noche, más que se acostó en su saco de dormir, se quedó dormido, se le veía cansado, como si la conversación que había tenido con Victorie le hubiera acabado todas las energías.
Yo estaba bastante preocupado, si era cierto que Teddy le había ocurrido algo grave el verano pasado ¿por qué nunca dijo nada? Debería ser algo espantoso para que Teddy se encontrara así, el chico que sonreía siempre, que ayudaba a todos, pero una cosa era cierta, y era que Teddy siempre se preocupaba de los problemas de los demás y era capaz de solucionarlo, pero nunca pedía ayuda. Sus problemas eran solo suyos y ni siquiera se notaba cuando se encontraba mal, bueno en realidad debió de notarse para que Victorie se diera cuenta, ahora que lo recuerdo se llevó un tiempo con su color de pelo original en vez de su mítico pelo azul radiante. Quería preguntarle cuanto antes que le ocurría, que le había pasado, pero sabía que esa noche no sería.

Después de varias horas sin dormir, decidí salir a dar una vuelta a correr para cansarme y poder descansar. Me puse el uniforme de Gryffindor y salí intentando no hacer mucho ruido.

No paraba de darle vueltas al tema y perdí la noción del tiempo.

Las calles del vecindario que conocía a la perfección, se encontraban totalmente en calma, lo único que se escuchaba eran mis pasos y mi respiración. Me paré justo en frente de una cafetería, estaba abierta, me pareció bastante extraño verla abierta, que yo sepa las cafeterías de por allí no abrían hasta las seis.
Miré a mi reloj eran las 6:10 ¿cómo puede ser? Yo salí a correr a las 4:30, sin ninguna duda me había demorado demasiado, me había pasado más de una hora corriendo y seguro que ya alguno se había dado cuenta de mi ausencia en casa, debía de volver cuanto antes a casa, el problema era que no recordaba por donde exactamente había venido y el cansancio empezaba a notarse. Caminaba sin saber muy bien por donde iba, le sonaba haber pasado alguna vez por allí, pero no estaba seguro de ir hacia su casa, después de varias vueltas conseguí llegar a casa, entré sigilosamente a la casa, pero había tardado aún más en encontrar el camino de vuelta, así que para cuando volví ya estaban la mayoría despiertos, en realidad ya estaban todos levantados menos Albus que seguía enroscado en su saco de dormir.

—¿dónde se supone que estabas?— preguntó mi madre preocupada que rápidamente se había acercado a mi para asegurarse de que estaba bien

—solo salí a correr—respondí intentando calmar a mi madre

—pensé que volviste a escaparte—dijo mi madre, y todos mis tíos y primos se nos quedaron mirando, mi madre se dio cuenta rapidamente de su error, pero ya era demasiado tarde para arreglarlo

—¡vaya con el Potter! Es todo un rebelde—comentó el tío Ron y Hermione le dio con un periódico en la cabeza para que se callara

—¿por qué no dejaste una nota?estábamos preocupados —preguntó mi padre

—ni qué fuera un crío—dije molesto

—yo no estaría tan seguro de eso—comentaron Albus y Victorie a la vez, la única diferencia es que Albus lo decia con un tono burlón y Victorie sería

—claro que no, pero no es que se diga que seas el más responsable, ni el más prudente—dijo mi madre, yo rodé los ojos indignado

—¿por qué saliste a correr tan temprano?—preguntó mi padre

—no podía dormir—

—espera ¿estás diciendo que no has dormido?—preguntó Teddy

—¿desde cuando llevas afuera?— preguntó mi padre sorprendido

—desde las cuatro—

—¿¡cuatro horas corriendo?!— exclamó mi madre

—no en realidad solo corrí una hora y cuarenta minutos, el resto del tiempo estuve intentando volver a casa—

Miedos || Jeddy (sin terminar) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora