Capítulo 7

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Yoriichi no supo por qué cubrió a Tamayo, ella era una demonio y sabría que ella podía esquivar ese árbol pero tenerla cerca, muy cerca suyo era algo que quería probar y debía admitirlo era placentero, era algo que no sentía desde que perdió a su amada Uta, y eso era algo que podía dibujar una sonrisa en su rostro, Tamayo por otro lado era la expresión del término rojo como un tomate, tener a yoriichi a menos de 15 cm de su rostro era una cosa, pero que este la estuviera agarrando de la cintura y que la hubiera atraído a él era otra completamente diferente, y aún que le gustaba ciertamente no estaba preparada para estar tan cerca de él y menos de esta manera, tal vez debería agradecer a Kokushibo que ya no se encontraba en el lugar por permitirle estar tan cerca de el

Pero esa afligida mirada en el rostro de yoriichi no le agradaba para nada, el todavía tenía la esperanza de que su querido hermano mayor se pudiera salvar, pero este combate demostró que estaba sumamente equivocada, los había intentado asesinar en más de una ocasión durante el combate

- tranquilo yoriichi-san - la bella demonio no era muy buena reconfortando a la gente, pero estaba dando su mejor esfuerzo en ese momento, no tardó mucho tiempo para que llegara un Pilar, el de la llamas

- Rengoku-dono - llamó yoriichi, el hombre se acercó a él con una mirada tranquila mientras miraba a su acompañante demonio

- así que es verdad que existe una demonio que no asesina humanos, interesante, pero no importa, Yoriichi-Sama puede verlo, a la Primera Luna Superior cuando lo vi retirarse no pude evitar pensar en que sufrieron complicaciones, y ciertamente no me equivoque, vengan será mejor que vayamos a la sede - el Pilar de las Llamas se alejo para darles algo de privacidad el amanecer llegaría en unas pocas horas y lo mejor era que Tamayo estuviera a salvo ya, no tardó mucho tiempo para que la demonio se metiera en su caja y yoriichi la cargará, y aún que no pareciera las pequeñas palabras que Tamayo le dijo lo hicieron calmarse

El camino a la sede de los cazadores de demonios fue completamente tranquila no había mucho que pudieran hacer, finalmente al llegar se encontraron con el actual líder de los cazadores o como más se conocía Oyakata-sama o el Patrón para los pilares, el cual no era más que un niño pequeño que había asumido el puesto de su fallecido padre, Yoriichi ciertamente se alegraba de ver al pequeño con una sonrisa en el rostro y ciertamente no podía evitar pensar en él hijo que perdió con su amada Uta

- hola yoriichi-sama, espero que le haya hido bien en sus misiones - el niño le dijo en un tono amable, su mirada denotaba curiosidad y hay lo comprendido ahora sabía el motivo por la que Oyakata-sama había pedido su presencia, el queria ver a Tamayo, Yoriichi no lo culpaba era un niño al final

- muchas gracias por permitirme estar aquí patron, las misiones estuvieron sencillas gracias por su preocupación - el niño asentio con la cabeza mientras le pedía a que ingresará al interior, adonde la luz del sol no afectara a la demonio, Yoriichi accedió con una sonrisa en el rostro mientras dejaba la caja en el suelo un poco más atrás de él en un lugar más cubierto por la sombra, no tardó mucho tiempo en que Tamayo saliera de la caja y volviera a su tamaño real mientras estiraba su cuerpo, no se había acostumbrado del todo a tener un cuerpo más pequeño, y cuando vio al pequeño simplemente no pudo evitar pensar Oyakata-sama es un niño??

Yoriichi le había contado un poco sobre la organización en la que estaba, era una organización no reconocida por el gobierno y que se dedicaban a cazar demonios, su trabajo era muy complicado y peligroso hasta que Yoriichi les enseñó las respiraciones que el mismo había creado, Llamas, Agua, Roca, Rayo y Viento, cuando los cazadores volvieron a combatir contra los Demonios esta vez el resultado fue completamente diferente y Oyakata-sama le agradecía con el alma a yoriichi, habían grandes espadachines en el Cuerpo de cazadores, pero ninguno de ellos se acercaba al potencial de yoriichi y mientras el pequeño miraba a Tamayo con fascinación, Yoriichi no podía hacer más que aguantar la risa por la incomodidad que tenía Tamayo al ser el centro de atención

Tu Me SalvasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora