Capítulo 2

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Volkov se encontraba en su despacho tomando una taza de café, era medio día y el no a ver dormido en varios días le empezaba a pasar factura, sus ojos se le cerraba y podía asegurar que veía sombras que no existían.

Cuando Leónidas casi tiro la puerta abajo gritando algo que no entendió sobre un bebé lo dejo pasar y se quedó en su misma posición, cuando su café que acabo decidió ir por otro vaso, salió y lo que pudo escuchar fue un fuerte bullicio, lo ignoro por completo y siguió con su camino hacia la cafetera.

Lleno su vaso por completo y lo empezó a preparar como le gustaba, salió de la sala de descanso dándole un sorbo que disfruto demasiado, cerró la puerta tras el y después de soplar la parte de arriba volvió a tomar de el.

-Volkov necesito hablar contigo-

Volkov dirigió su mirada a su amigo y jefe, el café que tenía en su boca se le fue a la garganta de la impresión haciendo que lo escupiera y empezará a toser con fuerza, Jack lo miraba sin saber que hacer realmente.

Una risa de bebé se empezó a escuchar por toda la comisaría, conway se había presentado a trabajar con su hijo pegado a su pecho gracias al regalo de Gustabo, todos se habían sorprendido pero rápidamente la sorpresa quedó atrás cuando la ternura los inundo,  empezaron a hacer preguntas y presentarse con el bebé que parecía entender todo.

Conway se había avergonzado cuando logro escuchar que alguno de sus policías le había dicho hermanito, el CNP río fuerte cuando se alejó sin decir nada y con la vergüenza oculta en un seño fruncido.

Volkov poco a poco se fue recuperando y cuando estuvo mejor miro a su amigo que jugaba con el bebé que parecía muy divertido al verlo ahogarse ya que lo señalaba con su manita mientras cerraba los ojos y se carcajeaba.

El ruso miro al bebé como si fuera un alíen de otro planeta, tenía mucho dudas y pocas respuestas, principalmente ¿¡De dónde saco conway un bebé!?

-Ven tengo que contarte varias cosas- paso su brazo por el hombro de su Comisario y lo guió a su oficina.

Estuvieron un tiempo hablando y tomando café, conway había sido regañado severamente por volkov que se encontraba enojado, triste y confundido, Jack le miraba tranquilo mientras acariciaba la cabecita de su bebé que poco a poco se dormía.

Después de un discurso muy emotivo por parte de volkov empezaron a trabajar, y el problema que Jack sabía que tendría llegó, tenía que asistir a un atraco y ni loco llevaría a su bebé.

Tomo a Horacio en brazos y camino hacia la entrada de la comisaría y busco algún policía que fuera capacitado para cuidar a un bebé mientras él no estaba, observó a Greco y a Leónidas sentados sin hacer nada y con mucho esfuerzo propio decidió confiar en ellos.

Los dos hombres aceptaron y cuando tuvieron al pequeño en brazos empezaron a jugar con el, conway tuvo que ser sacado de Comisaría casi a arrastras por volkov que le decía calmado que el bebé estaría bien.

El atraco había sido un éxito y se dirigían a comisaría después de varias horas, conway se encontraba de buen humor ya que quería ver a su bebé y confiaba que estaba bien.

Volkov encendió su radio y lo primero que escucho fue muchos gritos, sin querer alterar a Jack pregunto en voz baja que sucedía, el ruso sintió que el alma se le iba del cuero cuando unos agitados policías gritaron que no encontraban al bebé.

Estaban a una cuadra de la comisaría y el más alto no sabía que hacer, el súperintendente iba a matarlos a todos en cuanto llegará a comisaría.

Conway estacionó el patrulla y cuando estaba apunto de salir fue detenido por volkov que quiso dar una excusa tonta para que no avanzará pero al final termino diciéndole que ocurría.

Greco buscaba desesperado por las diferentes habitaciones y hasta cajones pero no lo encontraba, le parecía muy irreal como había pasado, solo se había distraído un segundo y el Horacio había desaparecido.

Salía de la puerta que llevaba a los vestidores cuando logro ver a su jefe sujetar del cuello de la camisa a Leónidas con una mirada se desprendía ira pura, lentamente quiso darse la vuelta pero el grito de conway lo detuvo.

El hombre se encontraba que echaba fuego por la boca, tenía a los dos policías hincados frente a él mientras que a gritos exigía una respuesta de cómo habían perdido a su hijo, intentaron explicarse pero solo lograban empeorar las cosas a niveles impresionantes.

Jack estaba sacando su porra cuando una voz llamo la atención de toda la comisaría.

-Este lugar está hecho una mierda- dijo Gustabo observando al rededor- ¿No lo crees pequeño?- pregunto al bebé que tenía en brazos.

La ira que había en Jack desapareció tan rápido como llego cuando la risa de Horacio le llegó a su oído, se acercó lentamente hasta estar frente al más bajo, Gustabo estiró al bebé hacia su papá que lo tomó con cuidado y lo abrazo a él como si su vida dependería de ello

-Dijiste que no sabías dónde estaba- un confundido Greco veía la escena.

-Solo quería darles una lección sobre no perder a un bebé- les miro cruzándose de brazos- Horacio llegó a mi gateando mientras me cambiaba-

-¿Dónde estuvieron?- pregunto conway

-Oh, fuimos a patrullar- dijo sin importancia

-¿Qué?- me miro como si estuviera loco.

-Tranquilo papá, nos fue muy bien- tomó la manita de Horacio entre la suya- Será un gran policía de grande, tiene potencial- le guiño el ojo para luego retirarse

Conway lo siguió con la mirada hasta que lo perdió de vista, volvió a mirar a su bebé que le miraba con sus grandes ojos azules, observó la ropa de su bebé y pudo ver una calcomanía en forma de placa policial que decía héroe en ella.

Sonrió y se llevó a su hijo a su despacho donde le dio de comer y lo durmió para que descansara de un día tan agitado como aquel.

Policía pensaba, su hijo siendo un policía, la simple idea de imaginar a Horacio cuando fuera grande siendo parte del CNP le sacaba una sonrisa boba

  

Carolcons
11/07/2020

Rayo de luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora